29/04/2024
12:34 AM

Agrupaciones ilícitas están asfixiadas financieramente

SAN PEDRO SULA. El interventor de la Policía Omar Rivera dijo ayer que las acciones coordinadas de los operadores de justicia contra criminalidad han permitido asfixiar financieramente a las maras y pandillas.

“Se les han congelado los bienes mal habidos, colocado un torniquete en el flujo de dinero ilícito, particularmente de la actividad del narcotráfico y ello es favorable para los propósitos de la guerra contra la criminalidad”, declaró Rivera en su intervención ayer en la emisora HRN.

El depurador de la Policía consideró que las actuaciones coordinadas de la institucionalidad han permitido asfixiar a las maras y pandillas. “El desmantelamiento de redes criminales, combate a la impunidad y destrucción de andamiaje económico de bandas delincuenciales deben ser acciones sostenibles a fin de evitar que exista un retroceso en materia de seguridad en Honduras”, expresó. Rivera señaló que “pese a que en los últimos cinco años la tasa de homicidios por cada 100,000 habitantes disminuyó de 86 a 59, y que posiblemente para finales de 2017 el indicador estará en más o menos 45, la población continúa intimidada por los actos violentos de los integrantes de bandas del crimen organizado, maras y asociaciones ilícitas, que tienen en su espantoso menú las muertes violentas y masacres como el principal producto de terror y el dinero de origen ilícito como su repugnante recompensa”. “Pero tal como se ha venido haciendo, a estos bárbaros hay que descalabrarlos, hay que desmontar ese armazón del mal y decomisarles la fortuna que han amasado”, dijo el interventor de la Policía. A criterio de Rivera, someter y desintegrar las estructuras delictivas, garantizar que quien comete un delito sea azotado con todo el peso de la ley y asegurar los bienes obtenidos de forma irregular permitirá reducir la capacidad criminal de los delincuentes en la nación y, consecuentemente, hará aminorar sustancialmente las muertes múltiples en el país, generando mayor tranquilidad a la gente. Manifestó que la mejor forma de desincentivar el accionar criminal de esas bandas es investigando, juzgando y castigando a los autores materiales e intelectuales en un país en el cual solamente el cuatro por ciento de los casos de homicidios llegan a juicio oral y público y reciben sentencia condenatoria.