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A bodega llegan a matar a tres hombres en aldea de Tocoa

  • 14 marzo 2013 /

Los hermanos Rony Aguilar López, Sergio Aguilar López y su guardaespaldas fueron acribillados.

Los habitantes de la aldea Quebrada de Arena de este municipio fueron estremecidos tras el asesinato de dos comerciantes y uno de sus empleados en el interior de su negocio.

El informe preliminar de las autoridades policiales establece que ayer a eso de las 2:30 pm, los hermanos Rony Aguilar López (32) y Sergio Amílcar Aguilar López (38) junto a su guardaespaldas Franklin Joel Casalegno, todos originarios Tocoa, se encontraban en el interior de una bodega de venta de abarrotes y pollos, cuando fueron atacados a balazos por individuos desconocidos.

Según testigos, varios hombres fuertemente armados llegaron al negocio y dispararon en contra de los tres hombres, causándoles la muerte en forma inmediata.

Se informó que la bodega era propiedad de los hermanos Aguilar López, quienes se dedicaban a la distribución de pollos al por mayor en la región.

A pesar de que los hombres andaban armados, no les dio oportunidad para defenderse.

Al escuchar las ráfagas de disparos, los vecinos de Quebrada de Arena llamaron a la Cruz Roja.

La ambulancia con varios elementos del cuerpo de socorro fueron los primeros en llegar a la escena, pero ya no había nada por hacer, los tres hombres yacían sin vida. Aníbal Flores, paramédico de la Cruz Roja, dijo que los cuerpos de los tres hombres quedaron en el interior de la bodega. Elementos de la Policía Nacional se desplazaron al lugar de la matanza para obtener los testimonios de los vecinos y así comenzar con las investigaciones del caso. El hermetismo privaba en los vecinos, quienes por temor no brindaron mayores detalles sobre los rasgos de los homicidas y los vehículos en que se conducían. Preliminarmente, las autoridades descartan el robo como móvil del crimen, debido a que las víctimas no fueron despojados de sus pertenencias. Las autoridades realizaron el levantamiento y trasladaron los tres cadáveres hacia la morgue de Medicina Forense en La Ceiba, donde fueron reclamados por sus apesarados familiares.