San Pedro Sula, Honduras.
Siete balazos acabaron con la vida del excampeón nacional de fisiculturismo e instructor personal Jesús Pastor Sánchez Rodríguez (45), quien fue atacado por desconocidos el sábado en horas de la noche cuando se conducía por la prolongación de la Avenida Júnior frente a Expocentro en esta ciudad.
La víctima iba en un turismo Chevrolet, café con placas PDG 7122. El informe preliminar establece que Sánchez fue atacado mientras hacía fila en el semáforo de la colonia Las Brisas, adonde fue alcanzado por dos motocicletas en las que se transportaban los asesinos que le dispararon en varias ocasiones.
Tras el ataque, los asesinos huyeron del lugar. Las autoridades llegaron a la escena minutos después del hecho y la acordonaron a la espera de las autoridades forenses que levantaron el cadáver alrededor de la 10:00 pm.
Los restos del fisiculturista fueron enviados a Medicina Forense y en la madrugada de ayer fue entregados a sus familiares, quienes lo trasladaron a Olancho, adonde ayer fue velado. Hoy será sepultado en Guarizama.
Ejemplar
La consternación privó en los amigos y familiares tras conocer la trágica muerte del entrenador y fisiculturista que durante varios años apoyó el deporte en San Pedro Sula. La Federación Nacional de Fisicoculturismo de Honduras y la Asociación Hondureña del American Pitubull Terrier en comunicados lamentaron el asesinato de Sánchez y decretaron tres días de duelo en honor a un hombre que llenó de gloria no solo a San Pedro Sula, sino a Honduras.
Todos los que lo conocieron coincidían en que la violencia arrancaba a un hombre trabajador, ejemplar, amante de su trabajo, promotor del deporte y un gran ser humano. “Era un gran luchador por las causas justas, un gran ser humano y entregado en su trabajo. Es lamentable lo que ha ocurrido y ojalá su crimen no quede impune”, dijo Emy Valladares.
Se informó que el fisiculturista laboraba como instructor de un gimnasio sampedrano y se destacó en diferentes categorías del fisiculturismo, en el que conquistó títulos regionales y nacionales. Además tenía una pasión por los perros pitbull, que por años se dedicó a la crianza y entrenamiento de esa raza canina. Parte de su orgullo recuerdan sus amigos era su perro Tyson, con el que logró ganar varias competencias en Honduras y El Salvador.
“Amaba sus perros, dedicaba con su familia el tiempo para entrenar y competir en diferentes lugares.
El deporte y los perros fueron su pasión”, expresó uno de sus amigos.
Siete balazos acabaron con la vida del excampeón nacional de fisiculturismo e instructor personal Jesús Pastor Sánchez Rodríguez (45), quien fue atacado por desconocidos el sábado en horas de la noche cuando se conducía por la prolongación de la Avenida Júnior frente a Expocentro en esta ciudad.
La víctima iba en un turismo Chevrolet, café con placas PDG 7122. El informe preliminar establece que Sánchez fue atacado mientras hacía fila en el semáforo de la colonia Las Brisas, adonde fue alcanzado por dos motocicletas en las que se transportaban los asesinos que le dispararon en varias ocasiones.
Tras el ataque, los asesinos huyeron del lugar. Las autoridades llegaron a la escena minutos después del hecho y la acordonaron a la espera de las autoridades forenses que levantaron el cadáver alrededor de la 10:00 pm.
Los restos del fisiculturista fueron enviados a Medicina Forense y en la madrugada de ayer fue entregados a sus familiares, quienes lo trasladaron a Olancho, adonde ayer fue velado. Hoy será sepultado en Guarizama.
 En la prolongación de la avenida Júnior, frente a Expocentro, fue atacado Jesús Pastor Sánchez, excampeón nacional de fisiculturismo e instructor personal en gimnasios.
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La consternación privó en los amigos y familiares tras conocer la trágica muerte del entrenador y fisiculturista que durante varios años apoyó el deporte en San Pedro Sula. La Federación Nacional de Fisicoculturismo de Honduras y la Asociación Hondureña del American Pitubull Terrier en comunicados lamentaron el asesinato de Sánchez y decretaron tres días de duelo en honor a un hombre que llenó de gloria no solo a San Pedro Sula, sino a Honduras.
Todos los que lo conocieron coincidían en que la violencia arrancaba a un hombre trabajador, ejemplar, amante de su trabajo, promotor del deporte y un gran ser humano. “Era un gran luchador por las causas justas, un gran ser humano y entregado en su trabajo. Es lamentable lo que ha ocurrido y ojalá su crimen no quede impune”, dijo Emy Valladares.
Se informó que el fisiculturista laboraba como instructor de un gimnasio sampedrano y se destacó en diferentes categorías del fisiculturismo, en el que conquistó títulos regionales y nacionales. Además tenía una pasión por los perros pitbull, que por años se dedicó a la crianza y entrenamiento de esa raza canina. Parte de su orgullo recuerdan sus amigos era su perro Tyson, con el que logró ganar varias competencias en Honduras y El Salvador.
“Amaba sus perros, dedicaba con su familia el tiempo para entrenar y competir en diferentes lugares.
El deporte y los perros fueron su pasión”, expresó uno de sus amigos.
