San Pedro Sula, Honduras.
La exjueza Wendy Vanessa Caballero, quien permanece con arresto domiciliario, llegó en la mañana de este miércoles a los tribunales sampedranos al juicio ora y público que se le sigue por el delito de abuso de autoridad.
Caballero enfrenta en proceso por haber enviado a prisión a un menor de edad en Trujillo, colón, cuando ella fungía como jueza de jurisdicción nacional.
El juicio está en una de sus últimas etapas. El caso ocurrió el 14 de diciembre de 2012 en Trujillo, adonde fueron detenidas 14 personas por lavado de activos.
Entre los detenidos estaba un joven que dijo en la audiencia de declaración de imputado que tenía 17 años, pero como no presentó partida de nacimiento, la jueza lo envió al centro penal de San Pedro Sula.
Por ese caso también la Fiscalía procedió en contra de la fiscal que presentó la acusación en contra del menor, pues debió verificar la información proporcionada por el detenido.
Fiscales de San Pedro Sula tuvieron que ser enviados a efectuar las indagaciones y la jueza Caballero hasta los multó durante una audiencia con el pago de dos salarios mínimos, lo cual fue desestimado con un amparo que por su cuenta interpusieron los fiscales.
En la acusación se señala que la exjueza cometió el abuso de autoridad al dejar varios días preso al menor de edad. Al final del proceso se probó que el detenido tenía 17 años y logró su libertad definitiva al igual que los demás.
La exjueza Wendy Vanessa Caballero, quien permanece con arresto domiciliario, llegó en la mañana de este miércoles a los tribunales sampedranos al juicio ora y público que se le sigue por el delito de abuso de autoridad.
Caballero enfrenta en proceso por haber enviado a prisión a un menor de edad en Trujillo, colón, cuando ella fungía como jueza de jurisdicción nacional.
El juicio está en una de sus últimas etapas. El caso ocurrió el 14 de diciembre de 2012 en Trujillo, adonde fueron detenidas 14 personas por lavado de activos.
Entre los detenidos estaba un joven que dijo en la audiencia de declaración de imputado que tenía 17 años, pero como no presentó partida de nacimiento, la jueza lo envió al centro penal de San Pedro Sula.
Por ese caso también la Fiscalía procedió en contra de la fiscal que presentó la acusación en contra del menor, pues debió verificar la información proporcionada por el detenido.
Fiscales de San Pedro Sula tuvieron que ser enviados a efectuar las indagaciones y la jueza Caballero hasta los multó durante una audiencia con el pago de dos salarios mínimos, lo cual fue desestimado con un amparo que por su cuenta interpusieron los fiscales.
En la acusación se señala que la exjueza cometió el abuso de autoridad al dejar varios días preso al menor de edad. Al final del proceso se probó que el detenido tenía 17 años y logró su libertad definitiva al igual que los demás.
