Ocurre en el aula de clases, donde algunos estudiantes disimulan su ausencia gracias a que un compañero firma por ellos la lista de asistencia, pero cuando se trata de documentos legales, las consecuencias pueden ser graves.
Así lo comprobó Karen Gisel Reyes Pineda, estudiante universitaria que tenía medidas sustitutivas por su presunta participación en los incidentes ocurridos durante la crisis que atraviesa la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (Unah).
Cuando esta joven se presentó a efectuar la firma del libro que por ley se le requiere, Reyes Pineda no solo firmó por ella misma, sino que lo hizo también por otra compañera con las mismas medidas, identificada por una vocera del Ministerio Público como Any Raquel Blanco.
El abogado Marcos Zelaya explicó que la acción constituye delito de Falsificación de Documentos Públicos, por lo que la estudiante fue detenida por las autoridades a la espera de determinar si se le abre un segundo proceso judicial por la acción cometida.
De ser juzgada y hallada culpable, podría ser enviada a prisión.
