Estocolmo.
El príncipe Carlos Felipe confesó lo nervioso que se puso al declararse a Sofía Hellqvist y pedirle la mano durante una entrevista conjunta al diario Dalarnas Tidningar, de la ciudad de la futura princesa sueca.
“Estaba nervioso y tenso. Parecía que mi cuerpo latiera. La noche anterior me desperté varias veces, no sé si Sofía lo notó. Quería que fuera una sorpresa”, aseguró el príncipe.
“Y me sorprendió, aunque me pareció que estaba extrañamente alegre esa mañana”, continúa Sofía, que normalmente es la que más temprano se despierta de los dos, a las seis o siete de la mañana. Pero esta vez era el príncipe el que estaba despierto, se puso de rodillas y recibió el “sí”.
Para el príncipe lo más importante fue que por fin podía presentar al mundo a su amada: “Fue tan maravilloso convocar esa rueda de prensa en la que hablamos del compromiso, finalmente poder tener a Sofía a mi lado, que ahora somos nosotros. Me dio una enorme seguridad, un sentimiento que no conocía. He estado con mis padres y mis hermanas tienen a sus esposos. Ahora por fin tengo a mi amada, mi seguridad”.
Origen
La llama del amor prendió en su primer encuentro, allá por julio de 2009. Un momento trascendental que Carlos Felipe recuerda así: “Nos conocimos en un almuerzo. Estaba sentado con unos amigos, y tú entraste con un amigo tuyo que conocía a los míos. La primera vez, algo hizo clic”. Para Sofía también fue amor a primera vista, aunque no esperaba entonces un final feliz como el de los cuentos de hadas: “Nos miramos de forma un poco tímida, y sí, algo hizo clic, pero que iba a terminar de esta forma nunca me lo habría imaginado. Todos los que conocen al príncipe se dan cuenta enseguida que es una persona muy humilde, cálida y dulce. Se te ve directamente en los ojos, ¿y quién puede resistirse? Cuanto más te conocí, más fue creciendo el amor”.
La primera cita no fue una al uso. No hubo cena romántica a la luz de las velas, pero fue de lo más excitante. “Me preguntaste si quería ir a los karts, supongo que querías mostrarme tus habilidades al volante”, le recuerda Sofía, mientras la entrevista se fue desarrollando en gran complicidad.
