26/04/2024
07:16 AM

La boda de Daniela Kattán y Daniel Yuja

La sociedad hondureña acude.

SAN PEDRO SULA.

Daniela María Kattán Saide y Daniel Jesús Yuja Matute llegaron a la iglesia La Sagrada Familia para bendecir su amor ante el Cristo Crucificado con el cariño de sus más entrañables.

El cortejo se encaminó hasta el altar a las 7:30 pm. El novio fue el primero en hacer el recorrido acompañado de su madre Connie Matute de Yuja. Le seguían su padre Giovanni Yuja y Juanilla Bueso de Kattán. Las damitas y caballeros, padrinos y el resto de sus allegados continuaron la suave caminata para dar paso a la novia, que acaparó todas las miradas.

Daniela iba del brazo de su padre Guillermo Kattán Salem y lucía hermosa con un ajuar hit de la diseñadora israelí Berta Balilti para su firma Berta Bridal. Era un diseño con delgados tirantes recamados, entalle con escote en V, falda campaña y todo con abalorios bordados a mano. Destacaban diminutas flores 3D en destellos empolvados. Lo combinó con un velo catedral en suave tul ilusión, diadema de brillantes de inspiración romana y un buqué de rosas con delicado follaje verde intenso con rosario de perlas incluido.

El padre Edwin Nieto presidió la celebración católica y después de una hora, Daniela y Daniel fueron proclamados como esposos, dando fin a casi tres años de bonito noviazgo.

¡Vivan los novios! Una vez concluía la misa, unos 600 invitados se trasladaron al centro de convenciones del hotel Copantl, que al completo, fue adornado por Jacqueline Cabrera con exuberantes e impactantes arreglos con rosas violeta, magenta, púrpura, fucsia, lavanda, lila y toda la gama de tonos fríos, logrando un factor de impacto entre los asistentes.

La organización y diseño de la boda Yuja Kattán corrió por cuenta de Ana María Durón de Dieckman, quien interpretó las ilusiones decorativas de los enamorados. Para el cóctel de bienvenida se dispuso un escenario floral donde la gente posó una y otra vez. Igual lo hizo en la entrada de la fiesta, donde un arco con túnel incluido le daba un aire de suntuosidad a simple vista.

También se fusionaron enormes lámparas chandelier, candelabros y burbujas de cristal, salas modernas, mesas imperiales plateadas y un bar donde los más jóvenes estuvieron de lo más alegres y frente a la pista.

El protocolo. Los novios, que llegaron entre júbilo desbordante, bailaron el vals con momentos cómplices y llenos de romanticismo. Los discursos de congratulación no faltaron y mucho menos el brindis, donde la gente les auguró amor por siempre.

De ahí en adelante todo fue fiesta. Para la música, los recién casados se decantaron por el disyóquey Bishop, quien puso mezclas de ritmos sofisticados y muy a la altura de este casamiento que destacó por ser una recepción totalmente clásica.

Muchas islas de delicatessen y dulcería variada así como el bufé instalado en el contorno de la fiesta hizo que la gente estuviera con total comodidad y se la pasara increíble.

Los novios hicieron el posado oficial en los idílicos ambientes y rincones que se prepararon en la velada y hasta cortaron la torta de diez pisos, entre piezas gruesas y delgadas, con una cascada de flores de pastillaje, creación de Nadia Dauabe de Canahuati para Signature’s Cakes.

Daniela y Daniel se fueron de luna de miel a Francia e Italia. Han visitado ciudades como París y Roma y han recorrido los más bellos pueblos y la campiña francesa. Al regresar, fijarán su residencia en San Pedro Sula.

Foto: La Prensa

Roque y Jenny Vitanza.

Foto: La Prensa

Jorge y Sofía Vitanza.

Foto: La Prensa

Adriana Bendaña y Daniel Sarmiento.