01/05/2024
12:26 AM

Esperaron más de un mes para tener maestro

Los estudiantes de tercer grado recibieron sus clases en la Departamental como medida para pedir un docente

Las clases pasaron del salón de clase con aire acondicionado al suelo de la Dirección Departamental de Educación de Cortés para los 40 niños de tercer grado de la escuela Álvaro Contreras de Jucutuma.

Todo por la amenaza a la que estaban expuestos de perder a su maestra y tener que distribuirse en los otros cinco grados del centro educativo.

Ante la indignación de los padres de familia al recibir esa noticia por parte de las autoridades distritales, decidieron junto con los escolares alojarse ayer por la mañana en las oficinas del ente educativo para rogar por una respuesta positiva a su necesidad de maestro.

Los menores abrieron sus libros y recibieron indicaciones de su maestra mientras estuvieron en el lugar. Tomaron lápiz y cuaderno e hicieron las tareas que tenían pendientes.

Solamente hicieron pausas cuando los medios de comunicación llegaban con “cámaras y micrófonos a interrumpirlos”, según confesó uno de los menores sentado en el suelo.

Fue hasta horas de la tarde de ayer que su directora y maestra, Norma Pineda fue atendida por la máxima autoridad de la departamental, Sara Doris Sambulá. Esta última le aseguró a la ahora exdirectora que el maestro que la reemplaza llega esta mañana y ella se trasladaba a otra escuela del sector Rivera Hernández, ya que era directora con licencia sin goce de sueldo.

“La Directora Departamental me atendió en la tarde y me dijo que ya estaba listo el maestro para los niños. Viene de la escuela Carlos Rivera Ramos”, dijo Pineda al salir de la Dirección de Educación acompañada de sus exalumnos de Jucutuma.

Los padres de familia se mostraron apesarados por perder a la directora que dirigió por varios años el desarrollo del centro, pero a la vez conformes porque sus hijos finalmente tendrán el maestro que durante todo el mes habían solicitado.

“No aceptamos que nuestros hijos vayan a distribuirse en los demás grados porque la Departamental no puede darles un maestro permanente. Por eso vinimos acá, la educación para nosotros siempre ha sido importante”, dijo una molesta madre de familia que llegó junto con su pequeño.

El centro educativo rural ha sido por muchos años una escuela ejemplar por la cantidad de días de clases que imparten sus maestros y por el gran trabajo que realizan los padres de familia, que con actividades de recolección de fondos han logrando instalarle aire acondicionado y puertas de vidrio a sus seis aulas.

Los padres han considerado una amenaza a la buena educación que reciben sus hijos las nuevas medidas aplicadas por al Secretaría de Educación y en reiteradas ocasiones han solicitado un “respaldo real” a las autoridades.

Normalidad

Por ley, la nueva directora de la Álvaro Contreras será la subdirectora Daysi de Castejón, que también imparte clases allí.

Con el problema del maestro resuelto, la escuela regresa a la normalidad, aunque el tema de la jornada extendida sigue generando malestar en maestros, padres y niños.

LA PRENSA dio a conocer ayer las difíciles condiciones en que los menores están obligados a cumplir con la doble jornada en su escuela. Aunque cumplen con el horario, la falta de merienda y agua potable les provoca salir del centro educativo a media jornada y muchos no regresan.

“Esta jornada extendida con el apoyo tardío de la Secretaría de Educación en vez de mejorar las clases viene a motivar la deserción escolar porque se está volviendo demasiado costosa para los padres más pobres”, comentó uno de los vecinos.