29/04/2024
06:13 AM

Crónica: La angustia de ir de compras con 100 lempiras en la bolsa

  • 28 febrero 2013 /

En las últimas semanas, productos han sufrido alzas. La historia de Noemí Mejía es la de miles de sampedranos

Resignada, Noemí Mejía (72) saca una bolsita que lleva escondida en su blusa. Ahí guarda un billete de 100 lempiras para pagar cuatro onzas de queso que compra en un puesto del mercado Medina.

La longeva regateó en varios negocios, ya que la menor unidad en que venden el queso los comerciantes es media libra; y el corto presupuesto no le ajusta.

“Tengo que comprar todo con este dinero que ando; solo en el queso gasté 17 lempiras. Vengo aquí porque supuestamente es más barato, pero apenas puedo llevar tres o cuatro cosas”, dijo la anciana, acongojada porque los altos precios de la canasta básica suben cada semana.

El último informe del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep) indica que el costo promedio de la canasta básica de alimentos en San Pedro Sula refleja un leve incremento de 0.31%, que en términos absolutos equivale a 13.45
lempiras, al crecer de 5,003.12 en la semana del 11-15 de febrero a 5,016.57 lempiras en la semana del 18-22 de febrero.

Noemí desconoce las cifras oficiales. Ella solo sabe que no le ajusta el poco dinero que le envía una hija que vive en Estados Unidos. Antes lavaba y planchaba ajeno para poder cubrir sus gastos, pero se enfermó y no lo puede hacer más.

“A veces ella -su hija- no me puede ayudar y por eso cuando me viene dinerito lo tengo que estar apuñando, para que me dure y no quedarme sin comer”.

La anciana luego de pagar una libra de pollo, que le costó 37 lempiras, busca algunas verduras en los negocios de la calle.

Se detiene frente a un puesto de melones: “Cuánto cuestan”, pregunta. El vendedor tratando de persuadirla contesta: “Se los doy baratos abuela, a 15 cada uno”. La septuagenaria cuenta los pesos que le quedan, y con tristeza se marcha.

“Si compraba el melón, desajustaba para las verduras”, lamentó. Luego de varias horas de búsqueda, compra lo demás. Para su alivio le quedan cinco lempiras para el regreso a casa.

En los mercados, miles de personas están en la misma situación que Noemí Mejía que van de puesto en puesto con la esperanza de conseguir las mejores rebajas.

Aumento

Según datos de la Secretaría de Industria y Comercio, el costo de la canasta básica anda en 5,016.57 lempiras, con un leve aumento en el último mes; sin embargo, vendedores y consumidores aseguran que los precios están por las “nubes”.

Si una persona gana el salario mínimo en su rango más bajo, apenas puede salir con los gastos que le genera el hogar. “Las ventas han disminuido en un 50%. La gente viene aquí y lo que se lleva es una libra o libra y media de carne, porque dicen que está muy cara”, expresó Selvin Mejía, dueño de un puesto de carne en el mercado Medina.

En los últimos días, las papas, quesos, huevos, tomates, harina, el café en bolsa, el arroz, y las carnes sufrieron un alza considerable.

Hace un mes, la libra de carne molida especial se encontraba en los mercados a 36 lempiras. Ahora está costando 40 lempiras.

Jorge Beltrán, director regional de la Secretaría de Industria y Comercio, asegura que nos se han registrado aumentos en los productos.
“Hacemos inspecciones permanentes para constatar que no existan irregularidades; pero instamos a la población a visitar las ferias del consumidor, ya que ahí encontrarán más baratas las verduras y carnes”.

Explicó que siempre en estas fechas, cercanas a la Semana Santa, los comerciantes aplican de forma abusiva un aumentos a los productos.
El economista Carlos Urbizo explicó que existe un desequilibrio entre el salario mínimo y el costo de la canasta básica.

“El problema más grande que hay en el país es que los ingresos de la mayoría de los asalariados son muy bajos. Dos tercios de la población no ganan ni siquiera el salario mínimo, porque las pequeñas empresas no pueden pagar más”.

Según Urbizo, la crisis económica de 2012 produjo una reducción de 400 lempiras en el total de los ingresos mensuales. “Cómo va a subsistir la gente si cada persona representa mil de la canasta básica, y las familias hondureñas son numerosas”.