San Pedro Sula, Honduras.
Cincuenta días sin practicar cirugías electivas a menores se cumplen hoy en el hospital Mario Rivas.
Estas operaciones fueron suspendidas debido a la afluencia de pacientes que ingresan con heridas de arma blanca y de fuego en las áreas de niños desde que estas son compartidas con los adolescentes.
Esta situación inició el 10 de enero, cuando las autoridades del Instituto Hondureño de la Niñez y la Familia (Ihnfa) ordenaron al hospital Mario Rivas que todos los adolescentes fueran asistidos en las salas pediátricas.
Cincuenta días sin practicar cirugías electivas a menores se cumplen hoy en el hospital Mario Rivas.
Estas operaciones fueron suspendidas debido a la afluencia de pacientes que ingresan con heridas de arma blanca y de fuego en las áreas de niños desde que estas son compartidas con los adolescentes.
Esta situación inició el 10 de enero, cuando las autoridades del Instituto Hondureño de la Niñez y la Familia (Ihnfa) ordenaron al hospital Mario Rivas que todos los adolescentes fueran asistidos en las salas pediátricas.
Ver además: Ni para elevadores hay respuestas en el hospital Mario Rivas
Pequeños avances
Apenas hace unas semanas se identificaron los espacios para separar a los adolescentes y se trabaja en un presupuesto para acondicionar una sala que estaría en el cuarto piso.
Jorge Villacorta, jefe de pediatría del Mario Rivas, informó que tienen la promesa de la viceministra de Salud, Sandra Batres, de agilizar este proyecto por ser urgente. “Nos dijo que una vez identificados los espacios se harían las gestiones para el proyecto”, comentó Villacorta.
El área tendría un cupo para 16 adolescentes: ocho mujeres y ocho varones. Para trasladar a los menores a esta área se requiere la contratación de 12 enfermeras. El médico informó que presentó otro proyecto para descongestionar la emergencia de pediatría.
Se trata de trasladar a los niños nacidos fuera del hospital de la emergencia de pediatría al área de neonatología.
“Para esto ya se aprobó la contratación de 12 enfermeras. Están pendientes las adecuaciones físicas”, agregó el profesional.
El problema no termina allí porque también se requiere contratar a un pediatra.
Afluencia
Estas obras son urgentes para descongestionar la emergencia de pediatría y el área hospitalaria. Según Villacorta, desde que los adolescentes se integraron a la sala de niños, la hospitalización ha incrementado 28% y las cirugías, 40%.
A esto se agregan el alza en el consumo de material médico y tratamiento y la sobrecarga laboral. Mientras se habilitan estos espacios y se contrata el personal, los jóvenes de 14 a 18 años que antes eran asistidos en las áreas de adultos seguirán revueltos con los niños.
Médicos de la sala de emergencia expresaron temor porque han identificado a integrantes de pandillas entre los pacientes que reciben. “Estamos muy expuestos. Hace una semanas teníamos dos menores, uno de ellos miembro de la mara 18 y el otro de la MS. Esto es un riesgo para nosotros como empleados y para los niños”, comentó una doctora que prefirió omitir su nombre.
Enfermeras de la sala agregaron: “Ya no trabajamos tranquilas. Tememos que en cualquier momento haya un incidente entre estos jóvenes que ingresan a emergencia y son mareros. Los niños ya no están seguros”.
