San Pedro Sula, Honduras.
La sustitución de subestaciones móviles rentadas por propias y la construcción de nuevas subestaciones son los proyectos que tiene la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (Enee) en un término de cinco años en San Pedro Sula.
En 2017, la Enee adquirió en arrendamiento dos subestaciones móviles, también llamadas
transformadores, para aliviar la carga de las subestaciones de La Puerta y Bermejo.
Con la acción mejoró el servicio de energía eléctrica de más de 18,000 abonados del sector Chamelecón y 12,000 del noroeste, ya que los residentes de estas zonas estaban sufriendo constantes suspensiones del servicio eléctrico por sobrecargas en esas dos subestaciones.
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Además de los recurrentes mantenimientos que hace la Empresa Energía Honduras (EEH).
Inicialmente el contrato era por un año, pero se ha ido renovando para aliviar la sobrecarga en las subestaciones La Puerta y Bermejo.
Son unas 21 colonias y empresas que dependen de los circuitos 281 y 206 del noroeste que han sido beneficiadas con el alivio de carga, unas 27 colonias y empresas de los circuitos 201 y 210 que alimentan al sector Chamelecón.
En este sentido, la Enee planea comprar sus propias subestaciones para no alquilar.
Milton Espinoza, subgerente de Planificación de Distribución, adelantó que tienen planeado construir en San Pedro Sula una subestación centro, una subestación Calpules, una subestación sur y una ampliación en la subestación Bella Vista.
“Son soluciones permanentes, porque las subestaciones móviles son trasladables y se podrán usar en cualquier zona que se necesite pero los transformadores son permanentes; se harán nuevas subestaciones y ampliaciones de las ya existentes”, detalló.
Compra
En el plan de expansión también buscan adquirir sus propias subestaciones móviles para dejar de alquilarlas.“Estamos adquiriendo subestaciones móviles propiedad de la Enee para no alquilar; pero ese equipo tiene un período de fabricación y entrega, y mientras tanto hay que seguir usando lo que ya está”, contó. Espinoza manifestó que serían tres subestaciones móviles que se comprarían: dos para San Pedro Sula y una para Choloma. Esta planeación es para cinco años. “Estamos viendo lo del financiamiento porque son proyectos caros”.
Para 2022 prevén construir nuevos circuitos y en 2023 la subestación Calpules.
El crecimiento de la ciudad en los últimos años ha sido muy favorable en los ámbitos comercial y residencial; sin embargo, la Enee no ha tenido la misma evolución y continúa operando con las mismas subestaciones y los circuitos saturados.
Actualmente los panoramas son dos: inversiones que no se llevan a cabo porque la estatal no puede garantizarles el servicio; y segundo, son empresas que se atreven e invierten en sus propios sistemas eléctricos, aunque esto maximiza el costo de la obra, y la Enee les retorna esa inversión por medio del débito en la factura del consumo mensual.
Para el caso, se conoció que en proyectos nuevos como el Century Business Square, en el bulevar Peraza, esquina opuesta del hospital Mario Rivas, la nueva plaza comercial Foresta en bulevar Mackay y el complejo de Altia Smart City que estaba desarrollando nuevas inversiones tuvieron que hacer desembolsos en proyectos de energía, ya que en el noroeste las subestaciones y circuitos están saturados.
Arnaldo Martínez, presidente del capítulo noroccidental de la Cámara Hondureña de la Industria de la Construcción (Chico), declaró que la Enee no tiene transformación de potencia en las subestaciones.
“Eso no permite dar energía a clientes grandes; pero los grandes proyectos tienen que hacer sus propias inversiones, dependiendo del tamaño”.
Martínez espera que con los proyectos de nuevas subestaciones y ampliaciones se mejore la red y no se limiten las nuevas inversiones tanto nacionales como extranjeras.
