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Detenido proceso de licitación de plantas de tratamiento

  • 02 julio 2020 /

Diversos sectores piden a las autoridades que retomen el proceso para construir las plantas y evitar más contaminación. Predio en Chotepe sigue ocupado por invasores.

San Pedro Sula.

A pesar de la pandemia, San Pedro Sula aún camina a convertirse en una ciudad inteligente, pero la prioridad pospandemia deberá ser tratar las aguas residuales.

Diversas voces coinciden en que los malos olores que se sienten desde hace más de un mes pueden tener su origen en la falta de tratamiento de los líquidos residuales, pues siendo una ciudad de más de un millón de habitantes lamentablemente aún no se tratan las aguas.

La construcción de las plantas de tratamiento ha sido un tema de debate y está contemplada en un contrato de concesión de aguas, pero han pasado 20 años y se incumplió.

El gerente de Aguas de San Pedro, Maurizio Chiovelli, dice que el contrato con la municipalidad de San Pedro Sula, que al final es un acuerdo con todos y cada uno de los sampedranos, exige a la concesionaria invertir en la construcción de una planta de tratamiento de aguas residuales, “y si bien la empresa quiere llevar a cabo esta inversión y estamos avanzando en el proceso”, las autoridades están bloqueando la iniciativa.

“Le puedo decir que estamos frente a un problema que no es personal o institucional, sino simplemente de voluntad política y conciencia humana”.

Recordó que ellos están listos para invertir, pero el predio en Chotepe que fue cedido por la alcaldía, según manda el contrato de concesión, continúa invadido y el proceso de licitación está detenido.

“Hubo autoridades en el pasado que en su momento pensaron en el bienestar y el futuro de San Pedro Sula y decidieron firmar un contrato con ASP para mejorar los servicios de agua potable”, agregó el ejecutivo.

Saneamiento

El empresario de la zona norte Ernesto Lázarus explica que si San Pedro Sula aspira a convertirse en la ciudad modelo de Latinoamérica, deberá arrancar los procesos de saneamiento a la brevedad posible. Caso contrario, las inversiones extranjeras no vendrán pospandemia y San Pedro Sula debe volverse atractiva para generar empleo e inversión.

“Las normativas mundiales están apresurando el tema de responsabilidad ambiental. Si no estamos cumpliendo con esas normativas, los mercados se cerrarán”.

Lázarus considera que tratar las aguas residuales se ha vuelto una urgencia en la ciudad para que no surjan más problemas de salud.

Datos
1- Fondos. Es una inversión de 60 millones de dólares que se hará en los próximos tres años. Se comenzó el proceso de licitación de las plantas, pero no se ha seguido porque los predios de Chotepe están en invadidos.
2- Contaminación. La concesionaria explica que no es competencia de Aguas de San Pedro, sino de las autoridades superiores, y el daño en los ríos debe atender Dima y junto a ellos hacen los controles. El tratamiento de las aguas sí está en el contrato.
3- Inversión. ASP dice que están listos para invertir solo que no se recuperaría la inversión en el tiempo que falta de la concesión que es de 30 años, se necesitan 10 años más para una parte y máximo de 20 para no afectar el bolsillo del ciudadano.
Igual opina el exvicealcalde Osmín Bautsita, quien dice que la pandemia será un tema del pasado pese a que el virus se quedará entre nosotros por su invisibilidad, “algo similar está pasando con temas fundamentales del saneamiento básico de nuestra querida ciudad de San Pedro Sula.

Más del 75% de nuestra población cree que con darle a la palanquita del sanitario ya está evacuado todo. Sí por supuesto que de nuestra casa, pero hay cuerpos de agua que cada segundo, los 365 días, al año reciben una carga de desechos líquidos y sólidos que con el tiempo agotaron la capacidad de autorregeneración y por esas altas concentraciones de contaminantes domésticos el medioambiente se va deteriorando y como consecuencia se desarrollan varias enfermedades”.

La insalubridad que representan las descargas permanentes a los cuerpos de agua de la ciudad son consecuencias deteriorantes acumulativas con el paso del tiempo, manifestó Bautista.

“Esto es una bomba de tiempo que tarde o temprano tendrá que resolverse al costo que sea”, enfatizó el exvicealcalde.

Urgente tratar las aguas negras

Martín Mayorquín, expresidente del Colegio de Ingenieros Civiles, dice que urgen las plantas de tratamiento, acompañado de la solución a los desechos o afluentes industriales y el manejo o separación del sistema de aguas lluvias para que no colapsen los colectores de aguas negras.

“Nosotros consideramos que la ciudad no tiene problemas de abastecimiento de agua, pero es necesario también tratar las aguas residuales. Está claro que ha existido incumplimiento del contrato de ambas partes”.

Para la ingeniera ambiental Diana Betancur es urgente desde el punto de vista ambiental y sanitario la inversión en las plantas depuradoras que requiere San Pedro Sula.

En una ciudad con más de 1.2 millones de habitantes, tratar las aguas es la única solución para evitar la contaminación.