La Casa Hogar La Misericordia, en Arriaga, Chiapas, luce desolada. El tradicional bullicio que generaban las decenas de migrantes desapareció. La afluencia bajó desde finales de junio cuando en los accesos a la casa instalaron retenes policiales y militares que no dejan pasar a los indocumentados.
Por esta razón, las atenciones en la casa de migrantes, caracterizada por una pintura en la pared del Señor de la Misericordia, se han reducido.
Es notoria la soledad que impera en el albergue desde finales de junio.
|
Políticas. Promueven la discriminación y xenofobia hacia los migrantes que están llegando a Tabasco. Piden garantizar sus derechos.
|
El gobierno municipal apoyará a los migrantes con trabajo temporal.
|
“Estamos esperanzados en una ayuda que nos han ofrecido para generar unos centavos mientras estamos aquí. Si nos dan ese trabajo, me quedo en Arriaga, pero cuando la situación mejore y no esté tan vigilado, sigo hacia arriba, buscando al norte”, dijo Isaías Alvarado, hondureño estacionado en la casa del migrante.
|
|
“Los retenes corren a los migrantes”: Elías Camacho, casa del migrante ARRIAGA, CHIAPAS. Elías Camacho Clemente ha tomado las riendas de la casa del migrante La Misericordia, que opera desde 2003, para atender a los migrantes que hacen un alto en este lugar. Camacho dialogó con LA PRENSA y relató la realidad que ahora aqueja a los migrantes con la puesta en marcha de los retenes y vigilancias en todo el estado de Chiapas.
“Los migrantes que antes venían en combi, a pie o de jalón, no están llegando. Nos han informado que han buscado nuevos caminos y que están rodeando las garitas. Ya no caminan por la línea del tren, ni por carretera, ahora se van por el monte. Los pocos migrantes que ahora tenemos albergados, tienen 10 días de estar en la casa. No se mueven porque ven peligros, todas las rutas son peligrosas, no hay por dónde pasar. Están acorralados y nos toca buscarles opciones para que decidan si inician algún trámite que les permita tener una estancia legal y algún trabajo en Arriaga”. |
“No quieren que la gente avance”:Ramón Márquez, Albergue la 72 TENOSIQUE, TABASCO. Ramón Márquez, coordinador del albergue La 72, aseguró que hay preocupación porque los flujos de migrantes van en aumento y las políticas de represión también están en el máximo nivel. “La cacería para los migrantes aumenta. El enfoque es blindar, impedir que la gente avance, que no lleguen a la frontera norte con Estados Unidos. Los bloquean y no les ofrecen opciones para ayudarlos. Hablan de una migración ordenada regular y segura, pero no se cumple.
Entonces ahora ellos van con mayor clandestinidad, buscan viajar por la noche, caminan más y están más expuestos a asaltos, crimen organizado y extorsión de las mismas autoridades. El Programa de Contención es la persecución. Las casas del migrante enfrentamos amenazas periódicas y está en juego el desgaste con la acusación. Buscan manchar el nombre. Tenemos una trayectoria impecable, pese a sufrir hostigamiento de las autoridades. Si recogemos migrantes nos dicen que traficamos personas. Es difícil la situación”. |