Honduras esperaba que la cosecha de café de la temporada dejara la exportación de al menos 8.2 millones de quintales, unos mil millones de dólares, eso considerando la merma por los efectos de la pandemia. Sin embargo, los últimos pronósticos no parecen tan buenos.
Las tormentas tropicales Eta y Iota provocaron daños graves en las carreteras de acceso y caminos hacia las zonas cafetaleras, sobre todo en el occidente, afectando la cosecha y venta de este que es el principal producto de exportación del país.
Los voceros del sector cafetalero han advertido que, por los daños de los huracanes, las exportaciones del aromático han disminuido un 45% en relación con la pasada temporada —40.57 millones de dólares— y el volumen en lo que va de la cosecha bajará en un 53%. Se vendieron 318,000 quintales de café, con una baja del 53% en comparación a los 675,000 quintales exportados de la cosecha anterior. Esos son los datos del Instituto Hondureño del Café (Ihcafé) al cierre de 2020.
Según este reporte, más de dos mil kilómetros de carretera quedaron incomunicados por los efectos de las tormentas, lo que afectó a 185 de los 224 municipios que cultivan café. Pero, además, las lluvias también provocaron la pérdida de la capacidad productiva para las siguientes cosechas de hasta 6,100 manzanas.
Los contratos de café ahora rondan los 689,000 quintales, mientras en la cosecha anterior eran para 1.73 millones de quintales, un 60% menos justo cuando el precio del quintal de café alcanzó un promedio de 127.21 dólares. Esto es 17% más que en la cosecha 2019-2020 cuando el quintal se cotizó a 108.89 dólares.
Ahora mismo la mayor preocupación de los cafetaleros son los posibles rebrotes del coronavirus, porque la pandemia representa un obstáculo para los cortadores de café, sobre todo los que llegan de Guatemala y Nicaragua, alrededor de medio millón de personas que cruzan la frontera y no pueden pagar el costo de la prueba del covid-19.
Eso más el hecho que las lluvias aceleraron la maduración del grano, son elementos suficientes para tener preocupados a los cafetaleros.
Sacar esta cosecha es otro desafío para el país, considerando que el café es la primera fuente de divisas y que Honduras ostenta la honrosa posición como el mayor exportador de Centroamérica, el tercero en Latinoamérica y quinto en el mundo. Es un reto no solo de los cafetaleros, sino de las autoridades que deben atender con celeridad las preocupaciones del sector.
