Con un leve parpadeo, ocurrido en el primer año del Gobierno de JOH, en que la política exterior manifestara vacilaciones e incluso intenciones de romper con Taiwán para establecer relaciones con China Continental. Esto bajo el supuesto que, siguiendo el ejemplo de Costa Rica (venta de un país a otro a cambio de un estadio de fútbol), Honduras podría conseguir que se cancelara la deuda externa por la inmediata voluntad del gigante asiático. Como efecto de tales cosas, estuvimos a punto de romper relaciones con Taiwán, cosa a la que afortunadamente se opusiera, con pragmático tino, el titular del Ejecutivo hondureño.
JOH tomó conciencia que China Continental no estaba interesada en el asunto; que no quería relaciones diplomáticas con nuestro país y mucho menos que rompiéramos nuestros vínculos con Taiwán. La tensión fue tal que llegó a Tegucigalpa el vicecanciller de Taiwán y Arturo Corrales, canciller de Honduras, se negó a recibirlo en la forma que indica el protocolo hondureño con tan altas personalidades. Y para ponerle el tapón al pomo, Corrales viajó en secreto a Pekín, en donde no fue recibido como enviado de un país extranjero, sino que como un particular hombre de negocios. Entrevistado, Corrales niega todo lo anterior.
Como es natural, el recién llegado embajador de Taiwán en Honduras, Joseph Kuo, proveniente de El Salvador, donde había ocupado cargo igual, se vio en una situación muy penosa -posiblemente la más dura de toda su carrera diplomática- que solo pudo superar gracias a su profesionalismo y a la paciencia y habilidad de la cancillería de su país.
Superada la crisis, Honduras acreditó embajador en Taipei; las relaciones de cooperación entre Honduras y Taiwán han dado enormes frutos, fortaleciéndose los vínculos entre las dos naciones y recibiendo la nuestra posiblemente la más grande cooperación que estado alguno le proporciona de acuerdo a su economía, extensión y tamaño de su población. En Taiwán estudian becados más estudiantes hondureños que en Estados Unidos y en cualquier otro país. La mayor cooperación agrícola que recibimos la da este país amigo. Y el apoyo militar, en donaciones de equipo, es superior del que a la fecha proporciona cualquier otro aliado. En lo cultural, la cooperación que ha hecho de Valle de Ángeles posiblemente es el ejemplo más destacado. Y por supuesto, en este mismo plano, hay que darle especial relevo que el gobierno de Taiwán, en cooperación con Canal 10 y La Tribuna, ha ejecutado el más exitoso programa de construcción y ampliación de aulas escolares que se tenga memoria en la historia reciente. Estas cuatro áreas a la que el Presidente de Honduras ha agregado la económica, se constituye en expresión de las valiosas relaciones que mantienen los dos países, gracias en parte al valioso trabajo que ha desempeñado en estos últimos cuatro años el embajador Joseph Kuo.
Al celebrar tan exitosas relaciones –y mientras JOH está en visita oficial promoviendo negocios de acuerdo al Plan 20/20– sentimos mucho que el embajador Kuo deje el país en donde, como ningún otro embajador, ha mantenido las mejores relaciones con columnistas y formadores de opinión pública hondureña. Se notará su ausencia, nos faltará su sentido de humor. Y especialmente, su cariño indudable hacia Honduras, los hondureños y nuestras cosas. ¡Buen viaje embajador Kuo! Que las nuevas misiones suyas en el cuerpo diplomático de Taiwán, sean iguales o más exitosas que las que ha tenido en Honduras con el Gobierno y con los hondureños. Buen viaje ¡querido amigo, embajador!
*Historiador y analista político
