China cambia su retórica en materia de hijos

Ante el envejecimiento de la población, China usa sus canales de propaganda para pedir a los jóvenes adultos que tengan más bebés.

Foto: Hector Retamal/Agence France-Presse — Getty Images

Una escultura en Wuhan, China, retrataba a una alegre familia de tres. Hace poco se agregaron dos niños.

mié 13 de marzo de 2024

Por: Isabelle Qian y Pablo Robles/The New York Times Company

Durante décadas, China restringió severamente el número de hijos que podían tener las parejas, argumentando que todos estarían mejor con menos bocas qué alimentar. La política del hijo único estaba entretejida en el entramado de la vida cotidiana, a través de lemas en panorámicos en las calles y en la cultura popular y el arte público.

Ahora, frente a una población cada vez menor y en envejecimiento, China usa muchos de los mismos canales de propaganda para enviar el mensaje opuesto: tengan más bebés.

El Gobierno ha estado ofreciendo incentivos financieros para que las parejas tengan dos o tres hijos, pero los esfuerzos no han tenido éxito. La tasa de natalidad en China ha caído abruptamente, y el año pasado fue la más baja desde la fundación de la República Popular China en 1949.

$!Hace poco se agregaron dos niños más a una escultura en Wuhan, China, que retrata a una familia alegre.

Por eso el Gobierno ha pasado a promover una “cultura pro natalidad”, organizando concursos de belleza para mujeres embarazadas y produciendo videos de rap sobre las ventajas de tener hijos. En los últimos años, la gala anual del festival de primavera de la emisora paraestatal, uno de los eventos televisivos más vistos del País, ha transmitido anuncios de servicio público que promocionan a familias con dos o tres hijos.

Política del hijo único

El esfuerzo ha sido recibido con burla generalizada. Los críticos han considerado la campaña como la señal más reciente de que los formuladores de políticas están ciegos a los crecientes retos que conlleva criar a varios hijos.

Entre 1980 y el 2015, el año en que terminó oficialmente la política del hijo único, el Gobierno chino utilizó una amplia propaganda para advertir que tener más bebés obstaculizaría la modernización de China. Hoy retrata a las familias numerosas como la piedra angular para lograr una sociedad próspera.

Para los funcionarios, imponer la política del hijo único también significó que tuvieron que desafiar la creencia tradicional de que los niños, y los varones en particular, proporcionaban una forma de seguridad en la vejez. Los lemas antes decían que el Estado se haría cargo de los chinos mayores. Pero para el 2040, casi un tercio de la población china tendrá más de 60 años. El Estado tendrá dificultades para mantener a las personas mayores, en particular a las de las zonas rurales, que reciben una fracción de la pensión que reciben los trabajadores asalariados urbanos. Ahora ha cambiado el mensaje oficial, destacando la importancia de la autosuficiencia y el apoyo familiar.

Pero los lemas de una época pasada están haciendo nuevo eco entre los jóvenes chinos. En las redes sociales, muchos han compartido fotografías de lemas de la política de hijo único como ingeniosas respuestas a lo que describieron como una creciente presión social para tener familias más numerosas. Algunas de las publicaciones han obtenido miles de me gusta y cientos de comentarios.

©The New York Times Company 2024