Ucrania.
Un día de pesadilla para la aviación comercial y las familias de decenas de víctimas.
Un Boeing 777 operado por Malaysia Airlines se estrelló este jueves en el este de Ucrania con casi 300 personas a bordo, la mitad de ellas de nacionalidad holandesa.
Tras ser informados sobre la tragedia, los familiares comenzaron a llegar al aeropuerto de Amsterdam, desde donde partió el vuelo.
El destino final era Kuala Lumpur. Pero cuando volaba por el este de Ucrania a 10.000 metros de altitud, el avión desapareció de los radares.
Funcionarios estadounidenses informaron bajo condición de anonimato que creen que el avión fue derribado por un misil tierra-aire.
Los primeros auxilios llegaron una veintena de minutos después, pero sin esperanza de encontrar sobrevivientes.
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, exigió una 'investigación internacional completa y transparente'.
