28/04/2024
12:58 AM

Papa Francisco pide 'despojar a la Iglesia de todo lo mundano”

El pontífice estuvo acompañado de sus asesores cardenalicios, entre ellos, el hondureño Óscar Andrés Rodríguez

Roma. El papa Francisco realizó ayer su primer viaje a Asís, cuna del santo al que debe su nombre pontificio y patrón de Italia, San Francisco de Asís, un encuentro en el que reiteró su voluntad de estar con los pobres y de “despojar a la Iglesia de todo lo mundano”.

En estos términos se refirió el papa Francisco en su tercer viaje apostólico en tierras italianas y en el que volvió a gritar al mundo su deseo de crear una iglesia “pobre para los pobres” al igual que hiciera el santo del que tomó el nombre.

La jornada se destacó por la imagen del grupo de asesores papales -el denominado G8-, que recién finalizó el análisis de una serie de reformas a la curia y que está presidido por el cardenal de Tegucigalpa Óscar Andrés Rodríguez.

El lugar elegido por el pontífice para aludir a esta necesidad de austeridad en el seno de la Iglesia Católica fue la sala del Expolio del Obispado de Asís, un lugar cargado de simbolismo por recordar el pasaje en el que “el pobrecillo”, apodo con el que se conoce en Italia a San Francisco, se despojó de todos sus ropajes.

Allí se encontró el Papa con pobres e inmigrantes y ante de ellos habló improvisadamente e invitó a la Iglesia a despojarse de esa mundanidad, “que mata al alma, a las personas y a la propia Iglesia”, a imitar a Jesús “que llevó una vida de despojo”.

Pero la primera visita que realizó Francisco a este municipio del corazón de Italia fue a los niños discapacitados y enfermos del Instituto Seráfico de Asís, en los cuales, afirmó, “se encuentran presentes las llagas de Jesús”.

“Estamos ante las llagas de Jesús, estas llagas deben ser escuchadas, deben ser reconocidas”, dijo el pontífice en su primera alocución.

Rodeado de sus ocho consejeros cardenales de los cinco continentes, el papa dejó de lado su discurso e improvisó: “Jesús está presente y escondido” en estos niños. “Cuando Jesucristo resucitó estaba resplandeciente, pero lo único que quiso conservar fue sus heridas”, dijo.

El papa Bergoglio es el 19 sucesor de San Pedro que visita la ciudad de Asís, a la que acudió en seis ocasiones Juan Pablo II y dos Benedicto XVI.

No comió con las autoridades

Francisco volvió a dar muestras de que su pontificado es el de la sobriedad, de que su preocupación por la pobreza sobrepasa las meras palabras y reside precisamente en los hechos.

El pontífice argentino rehusó comer con las autoridades, entre las que se encontraba el primer ministro italiano, Enrico Letta, que había acudido a Asís para asistir a la misa por el patrón de Italia, y decidió comer con los 55 pobres procedentes de centros de acogida de toda la diócesis en el comedor de Caritas.

Durante su improvisado discurso al clero, a las personas de vida consagrada y miembros del Consejo Pastoral con los que se reunió en la catedral de San Rufino de Asís, dijo que a los matrimonios siempre les da este consejo: “Pelead cuanto queráis pero nunca terminéis la jornada sin hacer las paces”,

Después de la comida en el centro de acogida del Obispado, Francisco se trasladó a la Basílica franciscana de Santa Clara, fundadora de la segunda orden franciscana, conocida como las clarisas.

A su salida del templo, miles de jóvenes esperaban a Francisco con cánticos y con una actuación en la que un grupo ataviado con camisetas azules cantó al unísono canciones de esperanza.

Antes de partir hacia el Vaticano, el Papa visitó el “tugurio” donde se refugiaba san Francisco y los suyos en la localidad cercana a Asís de Rivotorto.

Entre 60,000 y cien mil peregrinos y más de mil periodistas, una cifra récord, llegaron a Asís para seguir al Papa. Efe, AFP