Bagdad, Irak.
La crueldad del grupo yihadista del Estado Islámico (Isis) no deja de sorprender al mundo. Según fuentes que están en contacto con los terroristas, citados por el sitio BuzzFeed, la organización puso un precio al cuerpo sin cabeza del periodista estadounidense James Foley, el primer occidental al que mataron el pasado agosto.
En búsqueda de nuevos fondos para el financiamiento de la 'organización', según los intermediarios, el grupo, que pide un millón de dólares por los restos de Foley, está dispuesto a proporcionar una muestra de ADN.
Uno de los intermediarios es un ex combatiente rebelde sirio que comenzó a relacionarse con Isis al inicio de la guerra civil en Siria. Según dijo, ya tiene experiencia como intermediario en las negociaciones de rehenes con el frente Al-Nusra, la rama siria de Al-Qaeda, y con el propio Estado Islámico.
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Este ex rebelde dijo que un líder de Isis le pidió que encontrara un canal de contacto con el gobierno de Estados Unidos o directamente con la familia de Foley.
Este intermediario considera que su trabajo es 'humanitario' porque dice que su principal motivación es ayudar a la familia de Foley dar por cerrado su duelo con el cuerpo del periodista en su país.
Otro de los intermediarios, un hombre de negocios que ya ha ha participado en entregas de rehenes de Isis, fue más sincero: 'Esto es un negocio', dijo, sobre las comisiones que cobran por este trabajo.
Tanto el ex combatiente rebelde como el empresario coincidieron en que una importante pieza en las negociaciones sería un funcionario de alto rango en el Ejército Libre Sirio, la coalición rebelde respaldada por Estados Unidos, que participó en las conversaciones anteriores de Estado Islámico para la entrega de rehenes estadounidenses y europeos.
Un funcionario del Departamento de Estado dijo que 'estamos buscando más información' sobre la veracidad de lo propuesto por Isis, mientras que un diplomático de ese país calificó el hecho como 'repugnante'.
