Unos 120 hondureños se encuentra en Río de Janeiro para participar en la 28 Jornada Mundial de la Juventud que reúne a miles de feligreses católico por la visita del Papa Francisco en Brasil.
En una iglesia de Sao Paulo, un obispo brasileño le dio la bienvenida a una delegación de hondureños que se encontraba en el lugar. El papa Francisco pidió hoy en español a los fieles brasileños reunidos en el santuario mariano de Aparecida que recenpor él, porque tiene 'mucha necesidad' de suas oraciones, a la vez que aseguró que la Virgen, como una madre, 'nunca se olvida de sus hijos'.
'Os pido un favor: rezar por mí, lo necesito mucho', dijo el Papa hablando en español al final de la misa que ofició y a la que asistieron unos 200.000 fieles, que le ovacionaron en numerosas ocasiones y rompieron en aplausos cuando salió a una terraza del santuario para dirigirse personalmente a los que no pudieron entrar en el templo.
El papa Bergoglio, que está leyendo en portugués todos los discursos y homilías desde que llegó el día 22 a Río de Janeiro para presidir la XXVIII Jornada Mundial de la Juventud, cuando salió a saludar a los fieles improvisó y lo hizo en español.
'Os agradezco el que estéis aquí, en esta iglesia y pido a la Virgen de Aparecida que os bendiga a todos, que bendiga a vuestra patria', dijo en medio de los aplausos de los presentes.
Después, sonriendo, señaló: 'ahora quiero saber si es posible que una madre puede olvidar a sus hijos'. Los presentes rompieron con un 'no'. El obispo de Roma añadió: 'pues igual, la Virgen no olvida a ninguno de nosotros'.
Francisco impartió la bendición con una imagen de la Virgen de Aparecida que le regaló durante la misa el cardenal arzobispo de la diócesis y presidente de los obispos brasileños, Raymundo Damasceno Assis.