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Evo Morales retomó su agenda tras incidente con avión en Europa

  • 04 julio 2013 /

Morales llegó a La Paz anoche tras un largo viaje que incluyó escalas en España y Brasil.

El presidente de Bolivia, Evo Morales, retomó de inmediato su agenda tras regresar esta madrugada a su país procedente de Europa, donde tres países denegaron a su avión oficial el sobrevuelo y aterrizaje por la sospecha de que pudiera llevar a bordo al exanalista de la CIA Edward Snowden.

Morales, que arribó al aeropuerto de El Alto, vecino a La Paz, poco antes de la medianoche y tuvo un multitudinario recibimiento, se reunió a las 6.00 de la mañana hora local (11.00 GMT) con los jefes de bancada (grupo) de su partido en el Parlamento, según un comunicado de la Presidencia.

A las 8.00 (13.00 GMT) tenía previsto desplazarse a la región cocalera del Chapare, en Cochabamba, para presidir el aniversario del pueblo de Sinahota. Las maratonianas jornadas de trabajo de Morales, que suelen comenzar antes del alba, finalizar de noche e incluir desplazamientos por todo el país en un día, son célebres en Bolivia.

El propio mandatario ha reconocido en alguna ocasión que duerme muy poco, lo que ha motivado que varios de sus colegas latinoamericanos le recomienden que descanse y que cuide su salud.

Morales llegó a La Paz anoche tras un largo viaje que incluyó escalas en las españolas Islas Canarias y en la ciudad brasileña de Fortaleza, tras verse obligado a permanecer 13 horas en el aeropuerto de Viena a la espera de un plan de vuelo para regresar a Bolivia.

La espera forzosa en Viena tras un aterrizaje de emergencia en esa capital estuvo motivada por la prohibición de Francia, Portugal e Italia de que el avión presidencial sobrevolase o aterrizase en sus territorios ante la sospecha de que Snowden también viajara a bordo, lo que el Gobierno boliviano negó tajantemente.

Lo sucedido ha motivado una crisis sin precedentes entre Europa y Latinoamérica, desde donde prácticamente todos los países han protestado enérgicamente contra la 'ofensa' infligida al presidente boliviano, que consideran un insulto a toda la región.

Para respaldar a Morales y analizar esta crisis, varios presidentes de Estados de la Unión de Países Suramericanos (Unasur) se reunirán esta tarde en la ciudad central de Cochabamba, donde está prevista la llegada del presidente boliviano a las 16.00 horas (21.00 GMT), según su agenda oficial.

Entre los mandatarios que han confirmado su asistencia figuran los presidentes de Uruguay, José Mujica; Argentina, Cristina Fernández; y Ecuador, Rafael Correa, quien fue el promotor de este encuentro.

También se ha hablado de que podrían acudir los presidentes de Venezuela, Nicolás Maduro, y de Perú, Ollanta Humala, si bien sus respectivas cancillerías aún no lo han confirmado. Además, el Gobierno anunció el miércoles que la Cancillería llamará a los embajadores de Francia e Italia en La Paz, así como al cónsul de Portugal, para que ofrezcan explicaciones por lo sucedido, si bien no ha trascendido cuándo serán convocados los diplomáticos.

Así llegó Evo Morales a Bolivia

Con gesto agotado y emocionado, el rostro del mandatario quedó de inmediato oculto por la cantidad de collares de flores y bufandas artesanales que le fueron colgando las personas que lo esperaban en el aeropuerto altiplánico, a más de 4.000 metros sobre el nivel del mar.

Morales fue recibido a pie de escalerilla por su vicepresidente, Álvaro García Linera, y por el jefe del Estado Mayor, Edwin de la Fuente. Tras saludar a sus ministros, a las presidentas de la Cámara de Diputados y el Senado, y a representantes de movimientos sociales y sindicales, el presidente, recibido con honores militares, pasó revista a las tropas y después se subió a una tarima para escuchar el himno nacional.

También acudieron al abarrotado aeropuerto algunos embajadores, entre ellos los de Argentina, Cuba y Venezuela. 'Esta lucha no es por el Evo, es por los pueblos', dijo el mandatario en una breve intervención antes de dejar las instalaciones.

Consideró que lo sucedido en Europa fue 'una abierta provocación al continente' y aseguró: 'Nunca nos van a asustar porque somos un pueblo que tiene dignidad y soberanía'. 'He visto de cerca cómo algunas potencias se unen para seguir planificando políticas que sólo matan de hambre, que sólo hacen guerras, que sólo piensan en ellos' mismos, espetó.

Morales se enorgulleció de la unidad mostrada por los bolivianos y de la 'reacción inmediata' de los Gobiernos latinoamericanos ante lo que calificó como 'intentos de amedrentamiento del imperio', en alusión a Estados Unidos, país al que Bolivia culpa en último término de lo sucedido.

Cientos de bolivianos abarrotaron esta fría noche el aeropuerto de El Alto, donde la Policía tuvo que impedir la entrada a más personas ya que se trata de un aeródromo de pequeñas dimensiones. También el aparcamiento estaba lleno de personas, muchas de ellas aimaras como el presidente, que gritaban 'Evo, Evo' y en algunos casos incluso realizaban rituales para pedir por su salud.

Abajo, en la ciudad de La Paz, otros cientos se concentraron en la céntrica Plaza Murillo, sede de los órganos de Gobierno, donde se esperaba que se celebrara un acto de bienvenida, aunque finalmente Morales optó por marcharse directamente a descansar.

Un representante de la Cancillería explicó al canal estatal que el presidente viajará mañana temprano a la ciudad central de Cochabamba. Allí se espera la llegada a lo largo del día de varios jefes de Estado latinoamericanos, que se reunirán durante la tarde para analizar lo ocurrido y para arropar a su colega boliviano, al que desde ayer han enviado mensajes de apoyo.

Entre los mandatarios que han confirmado su asistencia figuran los presidentes de Uruguay, José Mujica; Argentina, Cristina Fernández, y Ecuador, Rafael Correa, quien fue el promotor de este encuentro.

También se ha hablado de la posible presencia de los presidentes de Venezuela, Nicolás Maduro, y Perú, Ollanta Humala, si bien sus respectivas Cancillerías aún no lo han confirmado. Lo sucedido ayer en Europa ha desatado una crisis diplomática sin precedentes entre Europa y América Latina, y provocado airadas protestas de prácticamente todos los países de la región.

Morales, que regresaba de Moscú tras participar en una reunión de países productores de gas, permaneció varado en el aeropuerto de Viena después de que Portugal, Francia e Italia le impidieran aterrizar o sobrevolar sus territorios, en una situación que el Gobierno boliviano ha calificado de 'secuestro'.

Los países europeos actuaron bajo sospecha de que el avión presidencial boliviano pudiera transportar a Snowden, buscado por Estados Unidos. Finalmente el presidente pudo abandonar Viena con un plan de viaje que incluyó escalas técnicas para repostar en las españolas Islas Canarias y en la ciudad brasileña de Fortaleza, desde donde voló a La Paz.

El gabinete de ministros boliviano permaneció en vigilia durante toda la crisis y anunció el miércoles que la Cancillería llamará a los embajadores de Francia e Italia en La Paz, así como al cónsul de Portugal, para que ofrezcan explicaciones por lo sucedido.