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Aumento de impuestos a los ricos en el centro del debate

  • 26 noviembre 2012 /

La situación podría sumir a EUA en una recesión. Hoy inician negociaciones.

Después del feriado de Acción de Gracias, los congresistas estadounidenses regresan a Washington hoy para negociar con Barack Obama un acuerdo histórico sobre el déficit, en el que los republicanos podrían aceptar por primera vez un alza indirecta de los impuestos a los ricos.

Faltan 37 días para el 2 de enero, cuando se llegaría al “precipicio fiscal” (“fiscal cliff”), la ley automática por la cual el impuesto a la renta aumentará para todos los estadounidenses, incluso los más pobres, y los presupuestos de todos los Ministerios serán recortados, incluso el sagrado de Defensa. Este abrupto ajuste para sanear la situación presupuestaria podría sumir al país en una recesión.

Para eludir estas medidas arbitrarias, Washington busca desarrollar un plan de reducción equivalente pero más equilibrado, y demócratas y republicanos redoblan la creatividad para hallar la forma de ahorrar al menos 1.2 billones de dólares de aquí a 2021 manteniéndose fieles a sus promesas de campaña.

La tarea es monumental pero indispensable para el restablecimiento de la credibilidad del crédito estadounidense, frente a un déficit del 7% del PIB (producto interno bruto) en 2012, y una deuda récord de 16.3 billones de dólares (108% del PIB). El presupuesto federal 2012, de 3.8 billones de dólares anuales, representa 24.3% del PIB, una proporción que nunca había sido tan alta desde la Segunda Guerra Mundial. Pero Obama lo juró: no habrá acuerdo sin aumento de impuestos al 2% de los hogares más ricos de Estados Unidos, cuyos ingresos superan los 250,000 dólares anuales.

Reacción

Es justo pedir al Partido Republicano que coloque la cuestión de los ingresos sobre la mesa de negociaciones como parte de la solución para evitar la aplicación automática de aumentos de impuestos y reducciones de gastos conocida como “precipicio fiscal”, dijo un senador de dicho partido.

Lindsey Graham, de Carolina del Sur, dijo que estaba “dispuesto a generar ingresos” con medidas tales como límites a las deducciones impositivas, las cuales, dijo, afectarían sobre todo a las personas de mayores ingresos. Pero afirma que no acepta aumentar los impuestos, una posición compartida por la mayoría de los republicanos en el Congreso.

El presidente Barack Obama quiere dejar que aumenten los impuestos para los ricos, pero no para los contribuyentes de clases media y baja.

Graham dijo a la cadena ABC que “por el bien del país” estaba dispuesto a violar una promesa contra los aumentos de impuestos si los demócratas aceptan cambios radicales en los programas de prestaciones sociales. Peter King, representante republicano, dijo que una promesa firmada hace años no se aplica necesariamente en condiciones económicas que han cambiado en gran medida. “Creo que todo debería estar sobre la mesa”, agregó. “Simplemente digo que no deberíamos asumir posiciones inalterables”.