28/04/2024
12:58 AM

Aliados se unen contra Rusia por caso de exespía

Inglaterra, Alemania, Estados Unidos y Francia acusan a Moscú de usar el gas Novichok contra el exagente y su hija.

    Londres/Moscú.

    Estados Unidos, Francia, el Reino Unido y Alemania pidieron ayer explicaciones a Rusia por el atentado contra un exespía ruso en Inglaterra, mientras Moscú se disponía a responder a las primera s sanciones británicas.

    “Nosotros, los líderes de Francia, Alemania, Estados Unidos y el Reino Unido, condenamos el atentado contra Serguéi y Yulia Skripal en Salisbury”, afirmaron en un comunicado conjunto la primera ministra británica Theresa May, su par alemana Angela Merkel, y el presidente francés Emmanuel Macron y el estadounidense Donald Trump.

    “El uso de un agente nervioso de rango militar, de un tipo desarrollado por Rusia, constituye el primer uso ofensivo de un agente nervioso desde la Segunda Guerra Mundial. Es un ataque a la soberanía británica”, añadieron, denunciando “un patrón” de conductas irresponsables del país presidido por Vladimir Putin.

    “Compartimos la conclusión británica de que no hay alternativa posible” a la responsabilidad rusa en el atentado, afirmaron los cuatro líderes.

    “Rusia debería en particular dar una información plena y completa del programa Novichok a la Organización para la Prohibición de Armas Químicas”, pidieron los cuatro, en un comunicado que zanja cualquier asomo de división entre los aliados.

    El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, respaldó a Londres en su “proporcionada” respuesta tras el ataque con gas nervioso contra un exespía ruso en Reino Unido, asegurando que deben haber “consecuencias”.

    Respuesta rusa. Moscú prometió ayer mismo responder “muy pronto” a la expulsión de veintitrés de sus diplomáticos en el Reino Unido, en represalia por el envenenamiento del exespía Serguéi y su hija Yulia, y adelantó que, como poco, las medidas incluirán la salida de personal diplomático británico en su territorio.

    La respuesta “será muy pronto” e incluirá “obligatoriamente” la expulsión de diplomáticos británicos en Rusia, dijo a los periodistas el ministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguéi Lavrov.

    Indicó que informará primero de las medidas a Londres, en lugar de anunciarlas ante los medios de comunicación.

    “Así actúan los caballeros, pero, por lo visto, cada vez quedan menos”, afirmó el titular de Exteriores, en una crítica al proceder de las autoridades británicas.

    El titular de la diplomacia acusó al Reino Unido de “rusofobia” y de tener “motivos poco limpios” al responsabilizar a Rusia del ataque, en un intento de que “el mundo occidental cierre filas con ellos”.

    El viceministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguéi Riabkov, negó la existencia de un programa de armas químicas llamado “Novichok” (Novato), ni en la URSS ni en Rusia.

    “Quiero decir con toda la seguridad que nunca existió ningún programa llamado ‘Novichok’, ni en la URSS ni en Rusia. Las informaciones sobre la supuesta existencia de ese programa las difunde gente que en su día emigró a Occidente, no sin la participación de gobiernos occidentales”, subrayó Riabkov a la agencia Interfax. Rusia, agregó, “cerró todos los programas de desarrollo de nuevas armas químicas nada más adherirse a la Convención” sobre la Prohibición de este tipo de armamento.

    “Al pensar acerca de los motivos del Gobierno británico, parece claro que Londres se encuentra en una situación muy difícil en cuanto a sus negociaciones con la Unión Europea sobre el ‘brexit’”, manifestó al respecto.