%Ciudad de México.
Sin embargo, fue liberado en 2013, tras 28 años en prisión, gracias a un fallo judicial que desechó varias causas contra él, una de ellas por los mencionados asesinatos.
Conocido como el 'Narco de Narcos', Rafael Caro Quintero, es considerado una de las leyendas en la historia del tráfico de drogas en México.
Nacido en Badiraguato, Sinaloa, el mismo pueblo de Joaquín 'El Chapo' Guzmán, Quintero, fue uno de los fundadores del mítico Cártel de Guadalajara, sus socios fueron Miguel Ángel Félix Gallardo y Ernesto Fonseca Carrillo 'Don Neto'.
El mayor de tres hermanos en una familia de campesinos de escasos recursos, cursó hasta el tercer grado de la escuela primaria, y al cumplir los 18 años consiguió su primer trabajo como camionero. En el camino conoció a sus primeros contactos en el mundo del narco, quienes le ofrecieron una gran suma de dinero para sembrar marihuana en los terrenos de su padre.
Las primeras ganancias del arrendamiento de sus fincas le dejaron suficiente para comprar otro terreno y así incrementar el número de cultivos. Luego se asoció con el capo Pedro Avilés Pérez, quien se convirtió en su maestro. Así, al inicio de la década de los 80, Caro Quintero ya era considerado el narcotraficante más poderoso de México.
En su apogeo, el Cartel de Guadalajara era la única organización narcotraficante en México, con una red de corrupción que se extendió por todo el país. A los 29 años, Caro Quintero había acumulado una fortuna de US$600 millones, 36 casas y unas 300 empresas, en el área de Guadalajara.
 El esquema de la organización criminal de Caro Quintero, según EUA.
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Sin embargo, su organización criminal sufrió su primer golpe en noviembre de 1984 cuando autoridades estadounidenses y miembros del Ejército mexicano realizaron una incautación de más de 10,000 toneladas de marihuana en el rancho 'El Búfalo', lo que le costó más de 2 millones de dólares en pérdidas.
Quintero y “Don Neto” se dieron a la tarea de averiguar quién era el responsable de dichas investigaciones, detectando que se trataba del agente de la DEA, Enrique Camarena Salazar. El 7 de febrero de 1985, el agente junto con su piloto, fueron secuestrados, torturados y asesinados.
Un protagonista hondureño
El Departamento del Tesoro de Estados Unidos identificó a Caro como el 'cerebro' detrás del asesinato de Camarena, crimen por el cual el narcotraficante hondureño Juan Ramón Matta Ballesteros también fue acusado. Ballesteros era, en ese entonces el puente entre los carteles colombianos y los mexicanos, según un informe de Insight Crime.
Matta fue capturado en abril de 1988 por oficiales del ejército hondureño, quienes lo recogieron después de su trotada de la mañana, y luego lo metieron en un avión y lo llevaron a República Dominicana. Desde allí fue trasladado en avión a Estados Unidos donde lo detuvieron oficialmente y lo acusaron del secuestro y el homicidio de Camarena.
Los investigadores forenses que fueron desde Estados Unidos hasta la casa donde torturaron e interrogaron a Enrique Camarena, encontraron cabellos y huellas de Matta Ballesteros y testigos protegidos lo señalaron como uno de los presentes en la reunión donde se ordenó el secuestro y posterior asesinato del agente especial de la DEA.
Matta Ballesteros fue condenado a varias cadenas perpetuas en una prisión de Estados Unidos en donde permanece hasta hoy en día.
En tanto, Quintero huyó a Costa Rica junto con su novia Sara Cosío, hija del entonces secretario de Educación de Jalisco y a su vez sobrina del gobernador de esa entidad.
Un mes más tarde, en Abril de 1985, las autoridades lo detuvieron en un operativo en la Quinta La California, dentro de la comunidad de San Rafael de Ojo de Agua en Alajuela. Lo sorprendieron en su cama y casi semidesnudo, fue trasladado a México donde se le inició el juicio en el que fue condenado a 40 años de prisión.
Irónicamente, al salir de la cárcel, fueron los líderes del Cártel de Sinaloa quienes le dieron la bienvenida, pero dejaron claro una cosa: ellos eran los dueños de dicho territorio y acordaron que Quintero se mantendría en paz.
Su liberación fue objetada por las autoridades mexicanas y, dos días después, la Fiscalía consiguió la orden de detención provisional con fines de extradición por diversos delitos de los que se le acusa en un tribunal estadounidense en California. Actualmente es considerado prófugo de la justicia mexicana y el gobierno de Estados Unidos ofrece una recompensa de cinco millones de dólares por su captura.
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