Brasilia, Brasil.
El instructor de la comisión del Senado que analiza si la presidenta brasileña, Dilma Rousseff, deberá ser sometida a un juicio político (impeachment) con miras a su destitución recomendó ayer que el proceso continúe, pues se cumplen todos “los requisitos legales”.
El informe del senador Antonio Anastasia, instructor del caso, fue divulgado en la página del Senado en Internet, en momentos en que él mismo comenzaba la lectura de las 126 páginas que tiene el documento ante los miembros de la comisión.
Según Anastasia, “la denuncia presenta los requisitos legales y formales exigidos por la legislación en vigencia, y especialmente por la Constitución Federal, para ser recibida”. El instructor dice que su voto “es por la admisión de la denuncia con la consecuente instauración de un proceso de impeachment, la apertura de un plazo para que la denunciada responda a la acusación y el inicio de la fase de instrucción del proceso” que puede llevar a recortar el mandato de la presidenta.
A la espera
El informe elaborado por Anastasia tras escuchar los testimonios de la acusación y la defensa será votado mañana en la comisión, que tiene 21 miembros, y en caso de ser aprobado por una mayoría simple será remitido al pleno del Senado, que a su vez decidirá el 11 o 12 de mayo sobre la apertura del juicio.
De autorizarlo, Rousseff será apartada del cargo por 180 días mientras es sometida a juicio político y en su lugar asumiría su vicepresidente Michel Temer, a quien la mandataria ha tachado de “traidor” y ha acusado de liderar un “golpe parlamentario” en su contra.
Antes de la votación de mañana, la comisión escuchará hoy por última vez a la defensa, que podrá hacer un postrero esfuerzo para convencer a los senadores de sus tesis.
Sin embargo, por lo visto en varias votaciones realizadas en la comisión sobre diversos asuntos y en los propios debates, entre los 21 miembros hay una clara mayoría de 16 senadores favorables a la instauración del proceso contra la presidenta, frente a solo cinco que se oponen.
