Bruselas, Bélgica.
Las escalofriantes conclusiones de la Fiscalía federal belga vuelven a sembrar el pánico en Francia luego de que revelaran que la célula terrorista de Bruselas pretendía atentar de nuevo en París, sin embargo al sentirse asediada, decidió de forma precipitada atacar en la capital belga.
La fiscalía confirmó “que, a partir de varios elementos de la investigación, se deduce que el objetivo del grupo terrorista era golpear de nuevo a Francia”. Pero “al verse sorprendidos por el rápido avance de la investigación, los terroristas optaron por un plan B: Atacar Bruselas”.
Según el primer ministro francés, Manuel Valls, estas informaciones son la “prueba” de que “pesan sobre Francia amenazas muy elevadas”.
Por otra parte, un juez inculpó ayer a Mohamed Abrini (ya imputado por el 13-N) de “participar en actividades de grupo terrorista y asesinatos” en el marco de la investigación de los atentados del 22-M en Bruselas.
El hombre del sombrero
El juez impuso a Abrini, detenido el día anterior, los cargos de participación en actividades terroristas y asesinatos en relación con los atentados del pasado 13 de noviembre en París, por los que era buscado tras ser visto junto a Abdeslam en una gasolinera de camino a la capital gala dos días antes.
Sus huellas y ADN se encontraron en el piso del distrito bruselense de Schaerbeek del que partió el comando que atentó contra el aeropuerto, así como en el automóvil que utilizaron los terroristas en París.
La Fiscalía también confirmó que Abrini es el tercer terrorista que huyó de los atentados en el aeropuerto de Bruselas-Zaventem, conocido como el “hombre del sombrero”.
Las escalofriantes conclusiones de la Fiscalía federal belga vuelven a sembrar el pánico en Francia luego de que revelaran que la célula terrorista de Bruselas pretendía atentar de nuevo en París, sin embargo al sentirse asediada, decidió de forma precipitada atacar en la capital belga.
La fiscalía confirmó “que, a partir de varios elementos de la investigación, se deduce que el objetivo del grupo terrorista era golpear de nuevo a Francia”. Pero “al verse sorprendidos por el rápido avance de la investigación, los terroristas optaron por un plan B: Atacar Bruselas”.
Según el primer ministro francés, Manuel Valls, estas informaciones son la “prueba” de que “pesan sobre Francia amenazas muy elevadas”.
Por otra parte, un juez inculpó ayer a Mohamed Abrini (ya imputado por el 13-N) de “participar en actividades de grupo terrorista y asesinatos” en el marco de la investigación de los atentados del 22-M en Bruselas.
El hombre del sombrero
El juez impuso a Abrini, detenido el día anterior, los cargos de participación en actividades terroristas y asesinatos en relación con los atentados del pasado 13 de noviembre en París, por los que era buscado tras ser visto junto a Abdeslam en una gasolinera de camino a la capital gala dos días antes.
Sus huellas y ADN se encontraron en el piso del distrito bruselense de Schaerbeek del que partió el comando que atentó contra el aeropuerto, así como en el automóvil que utilizaron los terroristas en París.
La Fiscalía también confirmó que Abrini es el tercer terrorista que huyó de los atentados en el aeropuerto de Bruselas-Zaventem, conocido como el “hombre del sombrero”.
