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Exponen en San Pedro cuerpo del popular santo Padre Pío

  • 04 febrero 2016 /

Miles de personas asisten a la plaza San Pedro para observar los restos de uno de los íconos del catolicismo.

Ciudad del Vaticano.

Los restos de padre Pío, icono del catolicismo popular italiano, serán expuestos desde el viernes hasta el 11 de febrero en la basílica de San Pedro con motivo del Jubileo de la Misericordia.

La urna de cristal del santo italiano, con el rostro cubierto por una máscara de silicona, fue trasladada el miércoles por primera vez del santuario de San Giovanni Rotondo, en el sur de Italia, a Roma, para ser expuestas primero en dos iglesias de la capital.

Las reliquias del fraile capuchino serán llevadas luego, el viernes por la tarde, en una inusual procesión, a la basílica de San Pedro junto con las de otro capuchino, también incansable confesor, San Leopoldo Mandic (1866-1942).

El papa Francisco ha querido rendir homenaje así a dos confesores ejemplares con ocasión del año del Jubileo dedicado a la misericordia y al arrepentimiento.

Foto: La Prensa

Los feligreses se aglomeraron para observar los restos del santo.


El cuerpo del monje de la comunidad de los capuchinos, que murió en 1968, fue exhibido por primera vez entre 2008 y 2009 en la cripta del santuario de Santa Maria delle Grazie, en Pullas (sur), suscitando devoción entre miles de italianos.

Cinco millones de personas, --entre ellas el entonces papa Benedicto XVI en 2009--, acudieron a esa remota localidad italiana, para rezar ante el popular fraile que presentaba estigmas, es decir marcas de la crucifixión, para pedirle ayuda.

Padre Pío fue proclamado santo en 2002 por Juan Pablo II en una de las ceremonias más multitudinarias celebradas en la plaza de San Pedro.

Célebre por las heridas en las palmas de las manos parecidas a las que sufrió Cristo en la cruz, padre Pío es venerado por interceder en la realización de milagros y en particular curaciones de graves enfermedades.

El Vaticano, que rechaza el culto de la personalidad, investigó por años el fenómeno e intentó frenar sus actividades, debido a que lindaban con la superstición.