El Cairo, Egipto.
'Una bomba fue pasada de contrabando en el avión, que condujo a la muerte a 219 rusos y otros 5 cruzados sólo un mes después de la decisión irreflexiva de Rusia', argumentan los terroristas.
El grupo yihadista Estado Islámico (ISIS) aseguró este miércoles en su revista que introdujo una bomba a bordo del avión ruso que se estrelló en la península egipcia del Sinaí el 31 de octubre.
El ISIS explicó que había descubierto 'una forma de superar la seguridad' en el aeropuerto de Sharm el Sheij, desde donde despegó el avión que se estrelló con 224 personas a bordo mientras se dirigía a San Petersburgo.
Los yihadistas denominan la bomba utilizada en la aeronave como IED (artefacto explosivo casero).
Los terroristas revelaron que su plan inicial era derribar un avión estadounidense, sin embargo debido a la ofensiva rusa en Siria, optaron por 'vengarse' de Moscú.
 Unos 220 pasajeros murieron en el siniestro del avión ruso en El Sinaí.
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'Una bomba fue pasada de contrabando en el avión, que condujo a la muerte a 219 rusos y otros 5 cruzados sólo un mes después de la decisión irreflexiva de Rusia', argumentan los terroristas.
Y agregan: 'Un año antes, el 19 de septiembre 2014, Francia comenzó con los ataques aéreos contra el califato. Al igual que Rusia, que fue cegado por la arrogancia, pensando que su distancia geográfica de las tierras del Califato podían protegerlo, no comprendió que su burla no se quedaría sin venganza'.
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'Por lo tanto, el Estado Islámico envió sus valientes caballeros a los países de origen de los cruzados malvados, dejando a París y a sus residentes sorprendidos y asombrados', subrayan.
Los yihadistas también mostraron fotografías de los pasaportes de ciudadanos rusos que fallecieron en el siniestro del A-321 en El Sinaí.
