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Gobierno de Trump pierde a otros 1,500 niños inmigrantes

  • 19 septiembre 2018 /

Una investigación del Congreso reveló que las autoridades estadounidenses perdieron la pista a más de 3,000 niños inmigrantes que fueron entregados a tutores.

Washington, Estados Unidos.

El Gobierno de Donald Trump ha perdido el rastro de unos 1,500 menores indocumentados que cruzaron ilegalmente la frontera de EEUU en lo que va de este año y fueron enviados con tutores o recluidos en centros de detención, según una investigación del Congreso.

La revelación surge luego de que funcionarios federales admitieran en abril pasado que desconocían el paradero de 1,475 niños inmigrantes, indicó el New York Times.

Los congresistas advirtieron en las conclusiones de su investigación sobre el riesgo de que los menores sean reclamados por personas que se hacen pasar por parientes con fines de explotación infantil o acaben con traficantes de personas.

El Departamento de Salud y Servicios Sociales (HHS, por sus siglas en inglés) ha transferido a miles de niños inmigrantes a diferentes albergues federales mientras que otros han sido entregados a tutores, mientras se procesa su solicitud de asilo o deportación.

Según los congresistas, el HHS admitió desconocer el paradero de 1,488 de los 11,254 niños que habían sido colocados con familias de acogida este año, aumentando el número de los niños 'perdidos' a unos 3,000.

Este miércoles, un grupo de senadores bipartidista presentó un proyecto de ley con el objetivo de proteger a los menores indocumentados, incluso cuando ya no están bajo custodia del gobierno.

La legislación busca que los funcionarios del HHS verifiquen antecedentes penales antes de colocar a los niños con tutores. También obligaría al Departamento a asegurarse de que los patrocinadores brinden la atención adecuada a los niños bajo su custodia, lo que incluye asegurarse de que comparezcan en sus audiencias en el tribunal de inmigración.

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Las diferentes iniciativas de Trump para modificar el acuerdo llegan tras de las fuertes críticas contra su política fronteriza de 'tolerancia cero', que resultó en la separación de familias.

Aunque puso fin a las divisiones, la Administración ha seguido ejecutando una dura política migratoria, según organizaciones humanitarias y legisladores del Congreso de EEUU.