19/04/2024
08:50 AM

Trump se reconcilia con May y pasea con la reina Isabel

El jefe de la Casa Blanca había criticado a la primera ministra británica, pero ayer dio un giro y la llenó de halagos.

    Londres.

    En un intento por zanjar la polémica creada por sus declaraciones en una entrevista, el presidente Donald Trump colmó ayer de elogios a la primera ministra británica Theresa May, que anunció que sus países buscarán un acuerdo de libre comercio tras el Brexit.

    Trump y May recorrieron de la mano los últimos metros hasta los podios de su conferencia de prensa en Chequers, la mansión campestre de la primera ministra en las afueras de Londres. “Lo que hagas, está bien”, dijo un Trump conciliador a la premier conservadora tras haber criticado duramente su estrategia negociadora en el Brexit en una entrevista en The Sun, afirmando que imposibilitaba un acuerdo comercial con EEUU, y elogiando a su rival político Boris Johnson.

    “Esta señora”, añadió, volviéndose hacia ella, “es una mujer increíble que está haciendo un trabajo increíble”.

    “Es una dura negociadora. He estado observándola el último par de días y es una persona muy, muy inteligente y resuelta”, añadió. “Prefiero tenerla como amiga”, concluyó.

    Trump ofreció una conferencia de prensa conciliadora con la primera ministra británica, Theresa May.
    Sobre la relación bilateral, “la relación especial”, como es conocida, Trump dijo que “es especial en su mayor grado”.

    Por su parte, May anunció que ambos países buscarán un “ambicioso acuerdo de libre comercio” tras el Brexit.

    “Ningunos otros dos países hacen más cosas juntos que nosotros para mantener a sus pueblos a salvo y prósperos... Y queremos profundizar esa cooperación aún más”, sentenció May.

    En una entrevista al diario The Sun, que empezó a difundirse el jueves por la noche cuando May presidía una cena de gala en honor de Trump, el presidente dijo que Boris Johnson sería “un gran primer ministro”, que los planes de May de mantener vínculos con la Unión Europea tras el Brexit imposibilitan un acuerdo comercial con EEUU y le aconsejó que negociara con Bruselas de un modo y ella hizo lo contrario.

    En Londres, miles salieron a las calles para protestar contra la visita, hasta hubo un bebé gigante en pañales.
    Té con la reina

    Trump cerró la parte oficial de su viaje al Reino Unido tomando el té con la reina Isabel II en el castillo de Windsor, antes de viajar a Escocia para una visita privada de dos días.

    La reina, sonriente, recibió a Trump y su esposa Melania a las puertas del castillo, antes de que se interpretaran los himnos nacionales y de que el presidente y la monarca pasaran revista a la Guardia Real.

    Al terminar el día, Trump viajó a Escocia adonde se quedará dos días en su lujoso complejo hotelero de Turnberry. Mañana viajará a Helsinki para una cumbre con el presidente ruso Vladimir Putin el lunes.



    Protestas

    “Este es el carnaval de la resistencia” o “¡A mí madre no le gustas, y le gusta todo el mundo!”, eran algunas de las pancartas que portaron algunos de los manifestantes que avanzaban por la calle Oxford Street con destino a Trafalgar Square. “¡No Trump, no Ku Kux Klan, no EEUU fascista!”, cantaban, mientras golpeaban cazuelas o hacían sonar trompetas.

    La imagen del día fue el gran globo representando a Trump como un bebé en pañales que se alzó cerca del Parlamento durante unas horas, con el beneplácito del alcalde Sadiq Khan, al que Trump ha criticado.