Washington, Estados Unidos.
Donald Trump arremetió ayer contra James Comey, tras emitirse una extensa entrevista televisiva con el exdirector del FBI sobre su interacción con el presidente estadounidense.
En la entrevista con ABC, Comey reconoció que su convicción de que Hillary Clinton ganaría las elecciones presidenciales de 2016 influyó en su forma de manejar la investigación sobre ella mientras él ocupaba el cargo.
Las declaraciones provocaron una furiosa ronda de tuits por parte de Trump. “Él tomó decisiones pensando que ella iba a ganar, y quería un trabajo. ¡Canalla!”, escribió en uno.
“James Comey es un probado SOPLÓN y mentiroso. Todo el mundo en Washington pensaba que debía ser despedido por el trabajo horrible que hizo hasta que, de hecho, fue despedido. Filtró información clasificada, por lo que debería ser procesado. Mintió al Congreso bajo juramento”, agregó.
Comey fue despedido abruptamente en mayo de 2017 por Trump, desconforme con la investigación de una posible confabulación de su campaña en 2016 con Moscú para perjudicar a su rival demócrata.
Chantaje
El cruce de acusaciones se produjo a 24 horas de que el libro de memorias de Comey “A Higher Loyalty: Truth, Lies and Leadership” (Una mayor lealtad: verdad, mentiras y liderazgo) salga a la venta al público.
En el libro, Comey compara la presidencia de Trump con “un incendio forestal” y señala que respeta la naturaleza clasificada de la investigación de Robert Mueller, el fiscal especial que lo sucedió, en la búsqueda de respuestas sobre la eventual connivencia del equipo de Trump con los rusos.
Comey también relata la obsesión de Trump con un dossier que elaboró el exespía británico Christopher Steele y que sugiere que la inteligencia rusa reunió información comprometedora sobre el magnate con el objetivo de chantajearle en el futuro y lograr su apoyo en diversos asuntos de política exterior.
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El documento asegura que Trump pidió a varias prostitutas que orinaran en la cama de la suite presidencial del Hotel Ritz Carlton de Moscú donde una noche antes había dormido el matrimonio Obama.
En el libro, Comey asegura que Trump le pidió que el FBI investigara el asunto para demostrar que era falso, puesto que había generado una gran ansiedad a la primera dama, Melania.
