Te amo, aquí estamos tu familia, no nos vamos a mover de aquí hasta tenerte con nosotros. '¡Resiste!, ¡aguanta!, ¡tú puedes, Erick!, las palabras de aliento de Karina para su hermano, atrapado entre los escombros, eran desgarradoras y tristes, pero más fue la noticia que recibió al enterarse que había sido rescatado, pero ya sin vida.
Durante más de tres días, los rescatistas buscaron sin cesar y desesperadamente a Erick Gaona Garnica, quien se encontraba atrapado en un edificio de la Colonia Roma tras los derrumbes que ya dejan al menos 302 muertos.
La familia de Erick se mantuvo en vilo, pendiente de su búsqueda, gritándole a la montaña de escombros con un megáfono. 'Ten fe, Dios te cuide'.
Poco después de las 15:00 horas, el hombre de 32 años fue ubicado dentro de las ruinas del inmueble, ubicado en Medellín y San Luis Potosí. Durante el momento del sismo, Erick se encontraba en el primer nivel del edificio.
A pesar de haber salido del lugar, regresó por algunas pertenencias de algunas compañeras de trabajo y la estructura se desplomó sobre una tienda de colchones localizada en la planta baja.
'Salió y volvió a entrar. Le dijimos que no lo hiciera porque se veía feo, pero entró a recoger sus cosas”, recuerda el vendedor del puesto de periódicos y golosinas que hay frente a lo que hasta el martes era un edificio de oficinas. Se acuerda de él perfectamente: robusto, grande, con barba, unos cuarenta años.
Una vez ubicada la existencia de un cuerpo, el equipo israelí y los Topos de México se hundieron entre las piedras y salieron con Erick envuelto en una sábana. Entonces, en un gesto que ya es un símbolo, levantaron el puño para pedir un minuto de silencio.
Los rescatistas explicaron después que, probablemente falleció en el instante del derrumbe, con la caída de los primeros cristales, relata el País de España.
Luego de ser extraído, el cuerpo fue entregado a personal de la PGJ capitalina para trasladarlo al Incifo.
