Manila, Filipinas.
La sangrienta 'guerra antidroga' del polémico presidente del país, Rodrigo Duterte, no tiene límites.
El mandatario filipino ordenó a la policía que mate a su propio hijo, Paolo Duterte, vicealcalde de la ciudad de Dávao, si éste se encuentra involucrado en el tráfico de drogas.
Así lo confirmó el diario The Guardian. 'Mi orden fue: si alguno de mis hijos está traficando drogas, mátenlo, así la gente no puede decir nada en mi contra', afirmó el mandatario.
Las declaraciones de Duterte se dieron luego de que el senador filipino Antonio Trillanes acusara al hijo mayor del mandatario de formar parte de una banda de narcotraficantes chinos.
Duterte agregó que el mismo le informó a su hijo Paolo sobre su decisión. 'Mis órdenes son matarte si te descubren, y yo protegeré al policía que te mate', señaló.
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El polémico mandatario ganó las elecciones presidenciales de 2016 gracias a una campaña en la que prometió poner fin al narcotráfico ejecutando a unos 100.000 traficantes y toxicómanos.
Desde su llegada al poder, la policía dice haber matado a más de 3.800 personas en su campaña contra las drogas, y otras miles murieron en circunstancias poco claras.
