Washington, Estados Unidos.
La madre de Damaris mandó a traer a su hija con un coyote en 2012, la joven llegó llena de ilusiones con la esperanza de iniciar una nueva vida en el 'país del Norte'. Aprendió muy rápido a hablar inglés y le encantaba ir de compras. Sin embargo, comenzó a relacionarse con pandilleros de los barrios pobres de la zona.
El pasado 10 de diciembre, la adolescente fue secuestrada en las inmediaciones de su residencia. Tras una intensa búsqueda, su cuerpo fue descubierto el 11 de febrero de este año. Los asesinos grabaron un video que muestra cómo torturaron a la joven antes de matarla.
Cerrato es acusado de planear el secuestro y la muerte de Damaris. Las imágenes, según el agente especial Fernando Uribe, muestran a Damaris ser interrogada y golpeada por un grupo de pandilleros, que luego la obligaron a desvestirse para que 'sintiera el frío que tuvo Christian el día que murió', según se escucha narrar a Cerrato.
Damaris Reyes Rivas llegó a los Estados Unidos huyendo de las amenazas de los pandilleros de la MS-13 en su natal San Salvador sin imaginar que los tentáculos de la Mara Salvatrucha la alcanzarían en Maryland, Virginia.
Ayer, un agente del FBI reveló detalles escalofriantes del asesinato de Damaris en el inicio del juicio contra los diez pandilleros sospechosos de haber apuñalado a la joven salvadoreña hasta la muerte.
 La adolescente Venus Iraheta será juzgada como una adulta por el asesinato de Damaris Reyes en Maryland.
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'Comenzó a escaparse de la escuela y de la casa por las noches. Se iba de fiesta y una vez desapareció por una semana', relató la acongojada madre a medios locales.
Según la policía, Damaris era la novia de Christian Sosa Rivas, 21, líder de una facción local de la pandilla que también fue asesinado. La mara culpó a la adolescente salvadoreña de entregar a Sosa a sus enemigos y juraron venganza.
 Damari junto a su madre, María Reyes, en una foto familiar tomada meses antes de la desaparición de la joven.
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El video fue supuestamente grabado por uno de los pandilleros detenidos, identificado como José Cerrato, que luego lo envió a los líderes de la MS-13 en Nueva York como prueba del asesinato.
Luego, una pandillera identificada como Venus Romero Iraheta, que también sostenía relaciones íntimas con Sosa, le dice a Damaris 'te veré en el infierno' antes de apuñalarla 13 veces.
El jucio contra los supuestos asesinos de la joven salvadoreña inicia luego de que el presidente Donald Trump prometiera 'eliminar' de las calles de EUA a la Mara Salvatrucha. La administración del magnate ha emprendido una ofensiva contra la MS-13 tras los violentos crímenes adjudicados a la pandilla.
