Bogotá, Colombia.
En el museo de la Policía Nacional de Colombia se exhiben la ropa que llevaba Escobar cuando lo mataron, su reloj dorado y la Glock. Pero de la Sig Sauer, fabricada por las empresas Schweizerische Industrie Gesellschaft de Suiza y Sauer de Alemania, se perdió el rastro durante los últimos 23 años.
Nuevos detalles salen a la luz 23 años después de la muerte del reconocido narcotraficante colombiano Pablo Escobar.
Medios colombianos revelaron que el coronel retirado de la Policía, Hugo Heliodoro Aguilar, reconocido por haber liderado la operación del Bloque de Búsqueda el día que fue abatido Escobar se quedó de manera irregular con la pistola favorita del capo del narcotráfico.
'La pistola de Pablo yo la cambié. Yo paré el reloj y lo entregué, y la pistola sí se la cambié, la mía se la tiré al lado y cogí la de él, yo la conservo por la historia que tiene', reveló Aguilar al periodista colombiano Daniel Coronell.
Aguilar se refuere a una SIG-Sauer P226 semiautomática con cargador para 13 balas, el arma favorita de Pablo Escobar.
Según la revista Semana, de Colombia, Escobar entregó su arma como muestra de buena voluntad, el 9 de junio de 1991, cuando se entregó a la Justicia. Fiel a su estilo, hizo un gesto teatral: le quitó las 13 balas de su cargador y le dio el arma al procurador general, Carlos Gustavo Arrieta.
Sin embargo, al poco tiempo, logró recuperarla dentro de la cárcel La Catedral, de la que se fugó un año después.
Las imágenes del asesinato de Escobar con fecha del 2 de diciembre de 1993, muestran la Sig Sauer cerca de su mano derecha y una Glock dentro de una cartuchera.
El coronel Aguilar aparece en las fotos posando junto al cadáver de Escobar, momentos después habría cambiado las armas según reveló el mismo.
En el museo de la Policía Nacional de Colombia se exhiben la ropa que llevaba Escobar cuando lo mataron, su reloj dorado y la Glock. Pero de la Sig Sauer, fabricada por las empresas Schweizerische Industrie Gesellschaft de Suiza y Sauer de Alemania, se perdió el rastro durante los últimos 23 años.
Por el hecho de haberse quedado de manera irregular con el arma del capo del narcotráfico, Aguilar sería responsable de los delitos de hurto, peculado y manipulación de evidencia, según Coronell.
Así mismo, el periodista hace referencia en su escrito al libro recientemente publicado por el general Óscar Naranjo, en la que asegura que Hugo Aguilar no fue quien disparó contra Pablo Escobar, como se había creído por décadas.
