Washington, Estados Unidos.
El presidente Donald Trump cumplió ayer con una de sus promesas de campaña al crear una oficina destinada a dar “voz” a las víctimas de crímenes cometidos por inmigrantes.
El anuncio oficial de la “Oficina de Enlace para Víctimas de Crímenes por Inmigración (VOICE)” corrió a cargo del secretario de Seguridad Nacional (DHS), John Kelly. Para hacer el anuncio, Kelly se rodeó de un grupo de víctimas que perdieron a sus familiares a manos de inmigrantes y que, ahora, con la nueva oficina, podrán obtener actualizaciones automáticas sobre las novedades del proceso judicial y, además, accederán a asesoramiento a través de un número de teléfono.
“Todos los crímenes son terribles, pero estas víctimas son únicas y con demasiada frecuencia ignoradas”, destacó Kelly. “Son víctimas de crímenes que nunca debieron haberse cometido porque las personas que los cometieron a menudo no deberían haber estado dentro del país en primer lugar”, consideró Kelly.
Los críticos alegan que el ente es innecesario, en parte porque varios estudios han concluido que los inmigrantes tienden menos a cometer crímenes que los ciudadanos nacidos en EUA.
El presidente Donald Trump cumplió ayer con una de sus promesas de campaña al crear una oficina destinada a dar “voz” a las víctimas de crímenes cometidos por inmigrantes.
El anuncio oficial de la “Oficina de Enlace para Víctimas de Crímenes por Inmigración (VOICE)” corrió a cargo del secretario de Seguridad Nacional (DHS), John Kelly. Para hacer el anuncio, Kelly se rodeó de un grupo de víctimas que perdieron a sus familiares a manos de inmigrantes y que, ahora, con la nueva oficina, podrán obtener actualizaciones automáticas sobre las novedades del proceso judicial y, además, accederán a asesoramiento a través de un número de teléfono.
“Todos los crímenes son terribles, pero estas víctimas son únicas y con demasiada frecuencia ignoradas”, destacó Kelly. “Son víctimas de crímenes que nunca debieron haberse cometido porque las personas que los cometieron a menudo no deberían haber estado dentro del país en primer lugar”, consideró Kelly.
Los críticos alegan que el ente es innecesario, en parte porque varios estudios han concluido que los inmigrantes tienden menos a cometer crímenes que los ciudadanos nacidos en EUA.