Washington, Estados Unidos.
Los ultramodernos cazas furtivos estadounidenses F-35 aterrizaron el martes en Estonia para realizar ejercicios comunes, la primera vez en esta región, preocupada por la actitud cada vez más agresiva de la vecina Rusia.
'Compartimos los mismos valores y estamos preparados para proteger el territorio de los países miembros de la OTAN contra toda suerte de agresión', declaró el ministro estonio de Defensa, Margus Tsahkna, en la base aérea de Amari, donde aterrizaron las dos aeronaves.
'La utilización de los aviones caza más modernos de Estados Unidos en Europa garantiza la soberanía de todos los Estados miembros de la OTAN', agregó.
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Joya de la tecnología, capaces de evitar los radares más sofisticados y volar a mach 1,6 (unos 1.900 kilómetros por hora), los F-35 están pensados para ser seis veces más eficaces que los actuales aparatos de combate aéreo y de vigilancia.
En su cumbre de Varsovia de julio de 2016, la OTAN decidió desplegar cuatro batallones en los países bálticos y Polonia para hacer frente a la política de Rusia en la región, controlada por Moscú en otro tiempo. Canadá dirige un batallón multinacional en Letonia; Alemania, en Litiuania y Estados Unidos, en Polonia.
