Managua, Nicaragua.
Por primera vez en la historia de Nicaragua, un matrimonio asume su conducción, lo que despierta temores de los opositores, que temen que derive en una dictadura familiar.
El líder sandinista Daniel Ortega inició el martes su cuarto mandato, de cinco años, y tercero consecutivo como presidente de Nicaragua, con un discurso en el que prometió que gobernará en unidad con todas las fuerzas económicas, sociales y políticas de este país.
Ortega fue juramentado en un ceremonia sobria celebrada en la Plaza de la Revolución, por el presidente del Parlamento, Gustavo Porras, quien le impuso la banda presidencial para gobernar junto a su esposa, Rosario Murillo como vicepresidenta.
A la juramentación asistieron sus aliados y homólogos Nicolás Maduro, de Venezuela; y Evo Morales, de Bolivia. También la presidenta de Taiwán, Tsai Ing-wen; el mandatario de El Salvador, Salvador Sánchez Cerén; y el de Honduras, Juan Orlando Hernández.
En su discurso, Ortega prometió “seguir trabajando en unidad con toda la fuerzas económicas, sociales y políticas” para sacar adelante al país, así como mantener los programas sociales que ha impulsado en los últimos 10 años para reducir la pobreza de un 45 a casi un 29%
Aseguró además una mayor estabilidad energética, clave para la economía, tras destacar los avances que su gobierno ha hecho en ese campo con el apoyo principalmente de Venezuela, su principal cooperante, ahora en crisis.
Ortega gobernará hasta 2022 con el respaldo de 71 de los 92 diputados en el parlamento.
“Las mujeres hemos avanzado, hemos crecido, hemos aprendido y tenemos el futuro por delante para crearlo juntas”, dijo Murillo.
Por primera vez en la historia de Nicaragua, un matrimonio asume su conducción, lo que despierta temores de los opositores, que temen que derive en una dictadura familiar.
El líder sandinista Daniel Ortega inició el martes su cuarto mandato, de cinco años, y tercero consecutivo como presidente de Nicaragua, con un discurso en el que prometió que gobernará en unidad con todas las fuerzas económicas, sociales y políticas de este país.
Ortega fue juramentado en un ceremonia sobria celebrada en la Plaza de la Revolución, por el presidente del Parlamento, Gustavo Porras, quien le impuso la banda presidencial para gobernar junto a su esposa, Rosario Murillo como vicepresidenta.
A la juramentación asistieron sus aliados y homólogos Nicolás Maduro, de Venezuela; y Evo Morales, de Bolivia. También la presidenta de Taiwán, Tsai Ing-wen; el mandatario de El Salvador, Salvador Sánchez Cerén; y el de Honduras, Juan Orlando Hernández.
En su discurso, Ortega prometió “seguir trabajando en unidad con toda la fuerzas económicas, sociales y políticas” para sacar adelante al país, así como mantener los programas sociales que ha impulsado en los últimos 10 años para reducir la pobreza de un 45 a casi un 29%
Aseguró además una mayor estabilidad energética, clave para la economía, tras destacar los avances que su gobierno ha hecho en ese campo con el apoyo principalmente de Venezuela, su principal cooperante, ahora en crisis.
Ortega gobernará hasta 2022 con el respaldo de 71 de los 92 diputados en el parlamento.
“Las mujeres hemos avanzado, hemos crecido, hemos aprendido y tenemos el futuro por delante para crearlo juntas”, dijo Murillo.