Los cinco directores de Cortés suspendidos por la Secretaría de Educación de Honduras la semana anterior por la toma del 4 de julio, esperan que las autoridades les anulen la pena pronto. Ellos apelan a las pruebas que tienen en su poder para demostrar que sí hubo clases en sus centros educativos ese viernes mientras se desarrollaba asamblea en otro colegio.
José Antonio Alas, director del Intae, uno de los cinco suspendidos por dos meses, accedió a dialogar con LA PRENSA sobre la sanción que debe cumplir y lo que piensa hacer para aclarar la acusación.
Sí hubo clases, la jornada de la mañana tuvo actividades normales y los docentes y estudiantes realizaron una jornada de limpieza porque estábamos en semana de prevención contra el dengue. En la tarde hubo fumigación y por prevención no llegaron los estudiantes.
Estuve allí. Llegué temprano y luego me dirigí a la Dirección Departamental de Educación para tratar un tema de salarios de docentes interinos. Cuando volví a la institución ya la comisión se había ido.
Efectivamente, en la audiencia de descargo a la que fui sometido llevé las constancias que estuve en la Departamental e incluso de la Secretaría de Salud que comprueba que realmente hubo jornada de fumigación. Otros estudiantes estuvieron practicando para concurso de oratoria y algunos fueron a una universidad privada que los invitó. De todo hay pruebas.
Estoy sorprendido por la medida. Aún no entiendo el porqué de la suspensión porque el Intae nunca ha sido una institución con antecedentes de perder clases, al contrario, quien nos conoce sabe que nos destacamos por actividades, como escuela para padres, concursos nacionales y microempresas, cada año a pesar de las limitantes.
Así es. Estoy seguro que ese día hubo clases y el centro educativo estuvo abierto. Y de la misma forma estoy convencido que mis otros cuatro colegas directores también están siendo sancionados injustamente.
Yo le tengo el respeto que se merece como mi autoridad superior. De hecho, hay muchas cosas que ha realizado que le reconocemos; pero sí siento que hay algunas decisiones que se toman muy de pronto. Utilizaremos el recurso de los 15 días para apelar, tenemos la esperanza de que se haga justicia pronto porque nuestras familias son las que terminan sufriendo.