San Pedro Sula, Honduras
Una década como novios finalizó con una inolvidable ceremonia. Los enamorados Jennifer Gissel Casco Zelaya y Mario Francisco Castillo Bueso han contraído nupcias.
El altar de la iglesia Nuestra Señora de Suyapa acogió la boda Castillo Casco y unos 200 invitados acompañaron a sus protagonistas a petición de Aracely y Mario castillo y Mercedes y Carlos Casco, padres de los recién casados.
El padre Enrique Silvestre presidió el sacramento en medio de cantos sacros, una emotiva liturgia y las promesas de amor ante el Cristo Resucitado. Como padrinos se escogieron a Jacqueline y Carlos Andrés Casco.
La ahora señora de Castillo tenía estampa de antaño con un ajuar blanco glacial, de escote barco con manga total y una vaporosa falda de podesuá de seda con opulente cola que rediseñada el atuendo al fruncirse para más comodidad. Como buqué, Jennifer optó por rosas dispuestas en forma de cascada que recordaban a las novias del ayer sampedrano.
La alegría. El banquete aconteció en el salón de siempre del Club Hondureño Árabe donde Susana Prieto hizo que la atmósfera fuese primaveral, distinguida y sobria con su organización y diseño. Jacqueline Cabrera ornamentó con su gran talento las mesas redondas e imperiales logrando el efecto deseado. Irela Pérez, ya en la recepción, hizo lo suyo haciendo que la celebración transcurriera sin contratiempos y logrando que el protocolo y la logística se cumpliera al pie de la letra.
Música en vivo y mucha distinción destacó y a la medianoche, Angélica Ledón y Miguel Vargas fueron los afortunados con el ramo y la liga, respectivamente. Los fastos duraron hasta el amanecer en medio de júbilo absoluto.
 Roberto y María Eugenia Panting.
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 Marce Barralaga, Orlando Martínez, Ana Cáceres y Chris Gamero.
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| Andrés Castillo y Carlos Panting.
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 Amir e Iris Nazzari con Carmen López y Audrey Verdial.
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