La Ceiba, Atlántida.
Un doble asesinato ocurrido la madrugada de ayer domingo acabó con la relativa tranquilidad de la comunidad garífuna Corozal, ubicada frente al mar Caribe, a unos quince minutos de la ciudad de La Ceiba.
Las víctimas fueron identificadas por las autoridades de Medicina Forense como Edwin Alberto López Flores (de 25 años) y José Eliazar Eliz Chimilio (de 24).
Los dos eran amigos y garífunas, además muy conocidos y queridos, por lo que el hecho ha consternado a los habitantes de la aldea, quienes viven del turismo y la pesca.
Relatos
Según información que testigos que se encontraban en el sector dieron a la Policía, los ahora occisos estaban departiendo en un restaurante-bar.
Al momento en que decidieron salir del lugar, aproximadamente a la 1:00 am, eran esperados por varios individuos armados. Cuando habían caminado unos cincuenta metros por una calle poco iluminada les dispararon en repetidas ocasiones hasta dejarlos muertos en la vía. Tras cometer el doble crimen los asesinos huyeron de la escena en un vehículo.
La Policía y los elementos de inspecciones oculares recabaron huellas que dejaron los asesinos e información de testigos para dar con los responsables, sin embargo, no se ha detenido a ningún sospechoso.
Las autoridades presumen que el ataque iba dirigido a Edwin López, puesto que él recibió la mayor cantidad de disparos, en su mayoría en la cabeza y tórax. El otro fallecido supuestamente perdió la vida porque lo acompañaba.
Alrededor de este caso privó el hermetismo por parte de las autoridades policiales y personas del lugar, ya que no manejan un motivo claro de por qué les habrían quitado la vida, tampoco se conoció a qué se dedicaban los ahora fallecidos.
La situación se puso tan difícil a la hora del levantamiento que hasta se les fue de las manos a las autoridades, ya que los familiares y amigos de las víctimas no dejaron que los forenses llevaran los cuerpos a la morgue de La Ceiba para practicarles la respectiva autopsia.
Los habitantes de Corozal se encuentran extrañados, pues no es común que ocurran asesinatos en su comunidad, y en apenas cuatro días tres personas han perdido la vida de manera violenta. El pasado miércoles, un hombre fue tiroteado en una de las calles de la comunidad y murió en la carretera CA-13 en la paila de un vehículo cuando era trasladado a un centro asistencial en un intento por salvarle la vida.
