Tegucigalpa, Honduras.
Más de cuatro horas estuvo ayer doña Telma Quezada (59) en una fila para lograr una cita con los médicos especialistas en el Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS).
La señora es diabética, padece de la presión y está operada de las dos rodillas, por lo que aseguró que no puede estar mucho tiempo de pie. La señora madrugó para lograr un cupo, sin embargo, cuando llegó ya había una gran cantidad de personas haciendo fila desde las 5:00 am. Trabaja en un hotel de la capital y manifestó que no es posible que los pacientes solo sean atendidos una vez al año por los especialistas.
“Esto es un caos, nos dan las citas cada año; el médico solo nos mira una vez al año, y no debería ser así porque uno ocupa más de una vez”, declaró con voz cansada la señora. Agregó que deberían darle prioridad en la atención a las personas que llegan con problemas de salud. En cuanto a medicinas, manifestó que sí encontró las que necesitaba. Lo anterior se debe a que un lote de medicamentos ingresó a la farmacia del hospital la última semana de octubre.
Doña Telma llegó buscando un cupo con un endocrinólogo, un nutricionista y un cardiólogo, debido a las diferentes patologías que padece. “La atención es pésima; las personas de las ventanillas son malcriadas, lo miran como que si uno no pagara, y los médicos ni lo voltean a ver a uno, solo escriben y ya le dan la receta”, declaró.
La situación de la señora es una de tantas que han vivido miles de pacientes que llegan desde la madrugada para llegar a obtener un cupo con los especialistas.
El Seguro Social está programando del 15 al 30 de noviembre las citas médicas de los pacientes para los primeros tres meses del próximo año. Por la razón anterior es que miles de personas se han aglomerado en el hospital de especialidades, ubicado en el barrio La Granja.
Una de las principales quejas de muchos pacientes es que las citas las dan muy espaciadas y hasta pueden morir esperando a que llegue la fecha en que el médico los atenderá. El IHSS atiende a alrededor de 1.7 millones de pacientes, entre afiliados directos e indirectos. “Vengo por una cita con el médico cardiovascular y me la van a dar hasta el otro año, y también necesito una con el urólogo; hay que esperar mucho tiempo”, declaró Gabriel Zúniga, quien sufrió una trombosis pulmonar.
La impaciencia y el estrés por la gran multitud de gente se podía observar en las personas, no obstante, se desarrolló con normalidad.
Más de cuatro horas estuvo ayer doña Telma Quezada (59) en una fila para lograr una cita con los médicos especialistas en el Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS).
La señora es diabética, padece de la presión y está operada de las dos rodillas, por lo que aseguró que no puede estar mucho tiempo de pie. La señora madrugó para lograr un cupo, sin embargo, cuando llegó ya había una gran cantidad de personas haciendo fila desde las 5:00 am. Trabaja en un hotel de la capital y manifestó que no es posible que los pacientes solo sean atendidos una vez al año por los especialistas.
“Esto es un caos, nos dan las citas cada año; el médico solo nos mira una vez al año, y no debería ser así porque uno ocupa más de una vez”, declaró con voz cansada la señora. Agregó que deberían darle prioridad en la atención a las personas que llegan con problemas de salud. En cuanto a medicinas, manifestó que sí encontró las que necesitaba. Lo anterior se debe a que un lote de medicamentos ingresó a la farmacia del hospital la última semana de octubre.
Doña Telma llegó buscando un cupo con un endocrinólogo, un nutricionista y un cardiólogo, debido a las diferentes patologías que padece. “La atención es pésima; las personas de las ventanillas son malcriadas, lo miran como que si uno no pagara, y los médicos ni lo voltean a ver a uno, solo escriben y ya le dan la receta”, declaró.
La situación de la señora es una de tantas que han vivido miles de pacientes que llegan desde la madrugada para llegar a obtener un cupo con los especialistas.
El Seguro Social está programando del 15 al 30 de noviembre las citas médicas de los pacientes para los primeros tres meses del próximo año. Por la razón anterior es que miles de personas se han aglomerado en el hospital de especialidades, ubicado en el barrio La Granja.
Una de las principales quejas de muchos pacientes es que las citas las dan muy espaciadas y hasta pueden morir esperando a que llegue la fecha en que el médico los atenderá. El IHSS atiende a alrededor de 1.7 millones de pacientes, entre afiliados directos e indirectos. “Vengo por una cita con el médico cardiovascular y me la van a dar hasta el otro año, y también necesito una con el urólogo; hay que esperar mucho tiempo”, declaró Gabriel Zúniga, quien sufrió una trombosis pulmonar.
La impaciencia y el estrés por la gran multitud de gente se podía observar en las personas, no obstante, se desarrolló con normalidad.
