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Periodista hondureña relata pesadilla que vivió en asalto

  • 12 noviembre 2016 /

Gabriela Hernández, presentadora de Motagua TV, fue inclusive manoseada por los delincuentes.

Tegucigalpa, Honduras.

Gabriela Hernández, periodista hondureña que labora como presentadora del Club Deportivo Motagua, fue víctima de la ola delincuencial que azota a Honduras.

La guapa chica relató mediante su Facebook personal que fue asaltada mientras abordaba un taxi al extremo de ser manoseada y obligada por los delincuentes a sacar dinero del cajero.

El hecho ocurrió la tarde del miércoles a las 6:20 pm luego de salir de su trabajo por lo que abordó el transporte sin jamás imaginarse uno de los momentos más terribles de su vida.

El mensaje íntegro de la periodista relatando los momentos de angustia

Justo a las 6:20 pm al salir de la radio tomé un taxi. Y de la nada dos hombres armados se subieron sin decir nada más poniendo seguro a las puertas del taxi y diciendo: 'Aquí manda la mara, yo trataba de estar lo más tranquila posible', comienza relatando.

Pero por dentro solo le pedía a Dios que no me dejara sola mientras mis lágrimas salían. Ellos solo le decían al taxista por donde agarrar mientras a mí me registraban y me tocaban toda tanto que me hicieron quitarme mis leggins y los tenis.

Cuando de repente al taxista lo golpeaban y también lo registraban. Él solo me miraba como queriendo decirme que me tirara de ahí, y de hecho me lo dijo cuando los mareros al oír eso le dieron un disparo en una de sus piernas.

Gabriela Hernández es la presentadora del programa Motagua TV, alusivo al cuadro capitalino.
Y lo dejaron tirado en ese lugar y claro ahí yo comencé a llorar más pensando que lo mismos me iban hacer a mí. Pero me dijeron: 'Cálmate que aquí la onda no es con vos pero si colaborá'.

Me llevaron a un cajero a sacar todo mi dinero y me obligó uno de ellos a besarlo, por si alguien pasaba pensara que él era mi pareja y mientras me obligaba a besarlo me tocaba.

Después de andarme en varios lugares me dejaron tirada en un lugar cerca del centro, amenazándome que no viera para atrás porque sino me iba a pasar lo mismo que le pasó al señor.

Foto: La Prensa

En redes sociales ella demuestra su amor a la Selección de Honduras.
Y lo más cruel es que pasamos por dos operativos y en ninguno de los dos nos hicieron parada. Solo puedo decirle gracias a Dios y a mi virgen por cuidarme y no dejarme sola. Y mientras nuestros gobernantes andan en carros blindados y motorizadas a sus alrededores.

'Nosotros nos exponemos a que nos maten por un par de lempiras o un celular. Que Dios cuide de Honduras y de nosotros los hondureños por que ellos jamás lo harán', concluyó.