Decenas de niños de más de diez comunidades de la zona rural de Santa Cruz de Yojoa ya reciben el pan del saber en modernas aulas, después de muchos años de hacerlo en galeras y bajo la sombra de árboles.
El sueño de los padres de familia y maestros de tener cómodos y seguros edificios se hizo realidad gracias al apoyo de la organización de España “Escuelas para niños del mundo”, municipalidad y sociedad de padres de familia, que se unieron para desarrollar los proyectos.
“El tener un edificio para sus escuelas era una de las grandes luchas de los pobladores de varias aldeas del municipio, gracias a Dios eso es una realidad y hoy los niños reciben sus clases en bonitos locales, después de un buen tiempo de hacerlo bajo árboles y galeras”, expresó David Padilla, ingeniero municipal.
Entre algunas de las aldeas que ya tienen escuela están La Paz, Ocotillo, Panacam, Plan Grande, 25 de Mayo, próximamente se beneficiará al Edén y Balín.
Ayuda humanitaria
Por varios años, los padres de familia y maestros venían gestionando ayuda ante las autoridades educativas y el Gobierno, pero nunca encontraron respuesta, fue entonces que tocaron las puertas de la organización “Escuelas para niños del mundo” y la respuesta fue positiva.
Alejandra Madrid, coordinadora de la ong española, manifestó que después de conocer las necesidades que enfrentaban los niños para recibir educación en diferentes zonas del municipios comenzaron a trabajar, eso les ha permitido hasta la fecha construir diez centros.
“La labor la realizamos en conjunto con la alcaldía con el apoyo de los padres de familia, en estos momentos estamos próximos a comenzar con la construcción de otros dos centros más éstos estarán ubicados en el Edén y Balín”.
Indicó que la obra está en proceso de diseño, razón por la cual no manejan el monto a invertir.
Para edificar las escuelas reciben el apoyo de voluntarios de España que llegan cada año a ese sector.
“Hemos encontrado comunidades en donde los niños reciben el pan del saber en malas condiciones, el mobiliario lo conseguimos con otros donantes”, dijo la joven altruista.
Padilla agregó que para la comuna es difícil ejecutar por sí sola ese tipo de obras, pues no cuenta con los recursos necesarios para desarrollarlos.
Gumercindo Flores, padre de familia de El Ocotillo, dijo que el tener un local para la escuela es de gran aporte para que sus hijos tengan una educación de calidad y sean buenos profesionales.