La temporada lluviosa trae consigo una amenaza latente sobre los pobladores de las zonas bajas de Baracoa, Puerto Cortés, donde convergen los ríos Ulúa y Chamelecón.
Los pobladores ya reportan pérdidas en los cultivos con las primeras tormentas, sobre todo de maíz que es altamente vulnerable.
Por este motivo continúan cambiando sus cultivos tradicionales por la producción de palma africana que es más resistente a las inundaciones.
Las cooperativas organizadas han reparado varios quineles reduciendo el riesgo en algunos puntos específicos del sector. El canal Chámber también sigue siendo una ayuda para bajar el nivel freático de la zona productora.
Ovidio Umaña, presidente del Codel (Comité de Emergencia Local) en la comunidad del Tapón de los Oros, aseguró que los bordos del río Ulúa están deteriorados y las fuertes corrientes amenazan directamente a unas 630 personas que tienen sus viviendas a pocos metros del caudal.
Umaña dijo que hicieron unas tres solicitudes a la Municipalidad de Puerto Cortés sin obtener resultados positivos.
Los vecinos piden a las autoridades la instalación de gaviones que eviten la erosión y además que levanten el bordo de contención.
El vecino Ulises Osorio indicó que se necesitan colocar gaviones en unos 400 metros frente a la aldea del Tapón de los Oros.
Osorio detalló que en las comunidades del Ramal del Tigre se están levantando unos bordos, pero lamentablemente las obras se ejecutan cuando se acerca el invierno y a veces no se culminan. En este sector hay al menos 14 comunidades donde residen unas 500 familias. Las aldeas más afectadas por las inundaciones son El Tigre, caserío La Leona y El Guayabo.
Los vecinos de Baracoa también exigen la limpieza en los canales de desagüe porque cada vez que llueve les causa problemas en las calles.
Cupertino Cartagena, presidente del patronato de Baracoa, contó que con las recientes lluvias el agua se salió de los canales, inundando el área comercial.
El líder patronal propone además la creación de una oficina de emergencia que funcione en Baracoa para darle cobertura y auxilio a las comunidades ubicadas en la zonas bajas.
Obras de mitigación
Sergio Villatoro, director de la CCIVS (Comisión para el Control de Inundaciones para el Valle de Sula), aseveró que trabajan para reducir el riesgo de inundaciones ya que no cuentan con los recursos necesarios para palearlo en su totalidad.
Actualmente están reconstruyendo un tramo de bordo en el sector de El Pantano, específicamente en la aldea El Roble y en El Remolino, junto con otras obras de protección secundarias.
En el sector del Ramal del Tigre, jurisdicción de Tela, están tirando dos tramos de bordo.
Villatoro indicó que varias obras que no se han logrado realizar estaban contempladas en la petición de ampliación del presupuesto que oscilaba en unos 290 millones de lempiras, pero solo están trabajando con 70 millones de lempiras y tuvieron que priorizar las necesidades en el Valle de Sula.
