Tegucigalpa, Honduras.
Al concluir el Foro de Alimentación Escolar se hicieron varias propuestas, entre ellas la de beneficiar e incluir a los pequeños y microagricultores e incluso a los padres de familia, en el proceso de compra de insumos de la merienda escolar.
En este cónclave, que duró dos días y celebrado en la capital, se dieron cita expertos y vinculados en el tema de alimentación escolar para definir una política alimentaria para los niños y jóvenes que asisten a clases en el sistema educativo público.
Desde el miércoles se conformaron mesas de trabajo para formular propuestas para que la nueva política se oriente a expandir los beneficios de la merienda escolar, que hoy día atiende a 1.4 millón de niños escolares.
Los padres de familia también pueden ser parte de este proceso, dijo Ana García, primera dama de la nación.
Mencionó que hay muchos cultivos locales que pueden servir, por ejemplo, para fortificar una tortilla, que “quizá en las ciudades las veamos como flores o plantas, pero en el interior del país son comestibles, entonces allí puede haber una potencialidad”.
En este diálogo participaron expertos en alimentación escolar del Programa Mundial de Alimentos (PMA) y la FAO. La participación de estos ejecutivos se enfocó en compartir sus experiencias, como Brasil, donde la población juega un papel fundamental de veeduría y supervisión de estos proyectos sociales.
En las mesas de diálogo se acordó incluir en la nueva política alimentaria escolar procesos de supervisión a los fondos que manejan las alcaldías y que deben ser destinados al programa. Los participantes señalaron la imperatividad de educar a los padres de familia para que se vinculen en todos estos procesos.
Al concluir el Foro de Alimentación Escolar se hicieron varias propuestas, entre ellas la de beneficiar e incluir a los pequeños y microagricultores e incluso a los padres de familia, en el proceso de compra de insumos de la merienda escolar.
En este cónclave, que duró dos días y celebrado en la capital, se dieron cita expertos y vinculados en el tema de alimentación escolar para definir una política alimentaria para los niños y jóvenes que asisten a clases en el sistema educativo público.
Desde el miércoles se conformaron mesas de trabajo para formular propuestas para que la nueva política se oriente a expandir los beneficios de la merienda escolar, que hoy día atiende a 1.4 millón de niños escolares.
Los padres de familia también pueden ser parte de este proceso, dijo Ana García, primera dama de la nación.
Mencionó que hay muchos cultivos locales que pueden servir, por ejemplo, para fortificar una tortilla, que “quizá en las ciudades las veamos como flores o plantas, pero en el interior del país son comestibles, entonces allí puede haber una potencialidad”.
En este diálogo participaron expertos en alimentación escolar del Programa Mundial de Alimentos (PMA) y la FAO. La participación de estos ejecutivos se enfocó en compartir sus experiencias, como Brasil, donde la población juega un papel fundamental de veeduría y supervisión de estos proyectos sociales.
En las mesas de diálogo se acordó incluir en la nueva política alimentaria escolar procesos de supervisión a los fondos que manejan las alcaldías y que deben ser destinados al programa. Los participantes señalaron la imperatividad de educar a los padres de familia para que se vinculen en todos estos procesos.
