Tegucigalpa, Honduras.
La destrucción de las tuberías del Hospital Escuela Universitario (HEU) o el vaciado de las pilas de almacenamiento de agua habría puesto en riesgo la vida de unos 36 pacientes que requerían de cirugías inmediatas.
Según denunciaron familiares de pacientes, desde el martes a las 2:00 pm fue suspendido el suministro de agua en el hospital. Esto provocó que unas 36 cirugías de emergencia fueran suspendidas, según informaron médicos del centro que se negaron a dar declaraciones por temor a ser enviados a audiencia de descargo por las autoridades de la Unah.
La falta de agua también ocasionó un foco de contaminación en el centro, ya que los baños de la institución se mantuvieron habilitados sin tener agua para vaciarlos.
Trabajadores del centro explicaron que ante la situación el personal de limpieza tuvo que cargar agua en cubetas para intentar limpiar la suciedad de algunas áreas.
El descalabro también abarcó al parecer el área de lavandería, adonde se acumuló ropa sanguinolenta similar al ocurrido en Semana Santa, luego de que las lavadoras presentarán fallas.
Esto obligó a las autoridades a solicitar la cooperación del Comité Permanente de Contingencias (Copeco), quienes ayer suplieron con cisterna de agua la necesidad inmediata de la institución.
Versiones
Las autoridades del HEU aseguraron a medios de comunicación que la falta de agua fue ocasionada por la destrucción de las tuberías.
Atribuyeron este hecho a un supuesto boicot que habrían ejecutado trabajadores del hospital.
Sin embargo, una fuente informó que el problema fue ocasionado en realidad por el vaciado de las dos pilas de almacenamiento de agua.
Cada una de estas estructuras almacena unos 100 mil galones del vital líquido.
La fuente dijo que esta área era dirigida y controlada por un trabajador que fue incorporado a otras labores del hospital, ya que según las autoridades universitarias no existía necesidad de mantener este trabajador vigilando y administrando las pilas.
Al dejar sola el área, las autoridades determinaron enviar a personal administrativo de servicio civil a supervisar las pilas sin horario determinado; pero después esta función le fue delegada a la compañía de seguridad privada.
La destrucción de las tuberías del Hospital Escuela Universitario (HEU) o el vaciado de las pilas de almacenamiento de agua habría puesto en riesgo la vida de unos 36 pacientes que requerían de cirugías inmediatas.
Según denunciaron familiares de pacientes, desde el martes a las 2:00 pm fue suspendido el suministro de agua en el hospital. Esto provocó que unas 36 cirugías de emergencia fueran suspendidas, según informaron médicos del centro que se negaron a dar declaraciones por temor a ser enviados a audiencia de descargo por las autoridades de la Unah.
La falta de agua también ocasionó un foco de contaminación en el centro, ya que los baños de la institución se mantuvieron habilitados sin tener agua para vaciarlos.
Trabajadores del centro explicaron que ante la situación el personal de limpieza tuvo que cargar agua en cubetas para intentar limpiar la suciedad de algunas áreas.
El descalabro también abarcó al parecer el área de lavandería, adonde se acumuló ropa sanguinolenta similar al ocurrido en Semana Santa, luego de que las lavadoras presentarán fallas.
Esto obligó a las autoridades a solicitar la cooperación del Comité Permanente de Contingencias (Copeco), quienes ayer suplieron con cisterna de agua la necesidad inmediata de la institución.
Versiones
Las autoridades del HEU aseguraron a medios de comunicación que la falta de agua fue ocasionada por la destrucción de las tuberías.
Atribuyeron este hecho a un supuesto boicot que habrían ejecutado trabajadores del hospital.
Sin embargo, una fuente informó que el problema fue ocasionado en realidad por el vaciado de las dos pilas de almacenamiento de agua.
Cada una de estas estructuras almacena unos 100 mil galones del vital líquido.
La fuente dijo que esta área era dirigida y controlada por un trabajador que fue incorporado a otras labores del hospital, ya que según las autoridades universitarias no existía necesidad de mantener este trabajador vigilando y administrando las pilas.
Al dejar sola el área, las autoridades determinaron enviar a personal administrativo de servicio civil a supervisar las pilas sin horario determinado; pero después esta función le fue delegada a la compañía de seguridad privada.
