Alrededor del mundo existen 179 personas que representan a Honduras como cónsules honorarios nombrados con un solo objetivo: que sirvan al país y ayuden a la comunidad hondureña en los lugares adonde los consulados y embajadas no llegan. Sin embargo, la realidad es otra.
El 70% de ellos, o sea 125, ni siquiera prestan el servicio para el que fueron escogidos; sólo fueron nombrados como cónsules honorarios y nunca se volvió a saber de ellos.
El exembajador de Honduras en Francia y experto en derecho internacional, Enrique Ortez Colindres, reveló que hay un porcentaje de los cónsules honorarios “que se dedican a actividades sospechosas y no traen ningún beneficio al país.
Hay muchas personas interesadas en ser cónsules honorarios y hasta ofrecen dinero por ese nombramiento”.
Otro de los objetivos principales de nombrar a un extranjero en ese cargo es que facilite las relaciones entre los países. Deben estar situados en lugares estratégicos donde se justifique por qué no hay delegaciones hondureñas, por falta de presupuesto u otras razones.
“Me parece exagerado que Honduras tenga 179 cónsules honorarios. Los están nombrando por ciudad y no por país.
Debemos tener este tipo de representaciones en países donde en realidad se necesiten porque en el mundo es normal tener estos cónsules, pero no tantos”, agregó el exembajador.
El listado
LA PRENSA conoció el listado de cónsules honorarios en todo el mundo, que deberían estar prestando un servicio a la comunidad de hondureños en el exterior y facilitando negocios bilaterales.
Generalmente, los cónsules honorarios -en su mayoría extranjeros- son personas destacadas en su país de origen y con muchos contactos políticos y comerciales, que servirían de enlace a los funcionarios diplomáticos hondureños en embajadas y consulados.
Para el caso, Honduras tiene cuatro cónsules honorarios en Colombia, tres en Chile, uno en Uruguay, uno en Paraguay, trece en Brasil, dos en Argentina, tres en Bolivia, uno en Perú, uno en Venezuela y tres en Ecuador en lo que respecta a América del Sur.
De estos cónsules, el más antiguo fue nombrado en 1980 y el más nuevo en 2006.
En Centroamérica
Honduras tiene un cónsul honorario en El Salvador, dos en Panamá, uno en Guatemala, dos en Nicaragua, dos en Costa Rica, doce en México, uno en República Dominicana, dos en Haití, cinco en Canadá y 18 en Estados Unidos.
De éstos, el más antiguo fue nombrado en 1970 y el más reciente en 2008.
En lo que respecta a Europa y Asia, Honduras tiene trece cónsules honorarios en España, tres en Noruega, uno en Luxemburgo, uno en Kuwait, uno en Siria, uno en Rusia, tres en Suiza, dos en Suecia y dos en Portugal.
Además, dos en Singapur, dos en Japón, dos en Corea, dos en Dinamarca, uno en Arabia Saudita, cinco en Taiwán, uno en Filipinas, uno en China, quince en Italia, uno en Malta, dos en Tailandia, dos en Austria, ocho en Alemania, dos en Australia, siete en Francia, dos en Egipto, tres en Israel, uno en Palestina, uno en el Líbano, uno en Indonesia, tres en Bélgica, uno en Mónaco, uno en Aruba, uno en Jordania, dos en Turquía y tres en Finlandia.
Los 179 cónsules honorarios fueron nombrados por Gobiernos anteriores, a excepción del señor Alberto Tazartes, cónsul honorario de Honduras en Milán, Italia, según acuerdo 1508 SRH del 2 de septiembre de 2010.
El nombramiento más antiguo fue en 1957, según acuerdo 10 SC del 25 de mayo, con que se designó al señor Primo Rovis en Trieste, Italia.
Hallazgos de interés
Curiosamente, el señor Hans Thorolf Brunvold, cónsul honorario en Puerto Príncipe, Haití, nombrado según acuerdo 208 SP del 8 de junio de 1987, es también el cónsul honorario de Honduras en Oslo, Noruega, según acuerdo 208 SP del 8 de junio de 1987.
Esto contraria la finalidad del ejercicio de un cónsul honorario de representar al país y ayudar a la comunidad hondureña en esos países.
Al consultársele sobre el listado de cónsules honorarios de Honduras en el mundo, el vicecanciller Alden Rivera le dijo a LA PRENSA que esa función se ha desnaturalizado y que el proceso se utilizó para brindar beneficios diplomáticos a residentes en el país que representan a Honduras.
“Los nombramientos en este Gobierno están detenidos por órdenes del presidente Porfirio Lobo Sosa y del canciller Mario Canahuati”.
El propósito de tener un cónsul honorario es importante para darle la facultad de representar al Gobierno de Honduras en los actos consulares administrativos.
“La idea es estar lo más cerca posible de la comunidad de hondureños en el exterior; por ello, los cónsules honorarios deberían tener un papel importante”, manifestó Rivera.
Beneficios diplomáticos
A pesar de que la función de un cónsul honorario se ha desnaturalizado, como lo afirmó el vicecanciller, los 179 funcionarios diplomáticos continúan representando a Honduras en el extranjero, por lo que perciben beneficios cuestionados.
“El cónsul honorario es considerado en el país receptor como un funcionario internacional diplomático. Por lo tanto tiene beneficios, no recibe salario del Gobierno de Honduras, pero tiene otras prebendas asociadas como la exoneración de pago de impuestos, uso de placas diplomáticas y otras propias de su función”, explicó Rivera.
Aunque el proceso de nuevas acreditaciones está detenido en la Cancillería, la presente administración ya recibió solicitudes de extranjeros que desean representar a Honduras en el exterior.
“Debemos reconocer que todas las administraciones se han descuidado en este tipo de nombramientos.
Es pertinente hacer una revisión detallada de todos los cónsules honorarios y cancelar todos los acuerdos de aquellos que nunca han tenido una relación directa con Honduras o que nunca han prestado un servicio al país”, anunció el vicecanciller.
Cabe señalar que los cónsules honorarios no portan un pasaporte diplomático, pero sí un carné que los acredita como representantes de Honduras en su país. Muy pocos hondureños que viven en el extranjero solicitan ser cónsules honorarios y por lo tanto el beneficio está mayormente en posesión de extranjeros.
