San Pedro Sula, Honduras.
Más de cinco mil empleos generará este año Gildan en las 10 plantas que tiene en San Pedro Sula, Choloma y Villanueva.
Claudia Sandoval, vicepresidenta de Ciudadanía Corporativa para Centroamérica y el Caribe, habló con LA PRENSA sobre la expansión de la maquila y alabó la calidad de mano de obra hondureña.
Gildan inició sus operaciones en el país en 1997 con una planta de costura. Desde entonces la compañía ha expandido sus operaciones para la producción de prendas deportivas como camisetas básicas, sudaderas, ropa interior y calcetines generando hasta la fecha más de 24 mil empleos en el valle de Sula.
-El año pasado Gildan anunció nuevas expansiones. ¿Cuál ha sido el proceso?
El año pasado iniciamos dos grandes obras. La remodelación de una planta textil que ya está en funcionamiento y con la mayoría de los empleados ya contratados, y la construcción de un centro de distribución que está en el punto de finalización y será inaugurado en agosto. Entre las dos obras se contratarán a unas dos mil personas.
-¿Planean crear más plazas laborales aparte de las que necesitan por las ampliaciones?
Sí. Nuestra proyección es que para finales de 2014 contratemos alrededor de cinco mil personas entre todas las plantas que tenemos. A la fecha hay cerca de 24 mil colaboradores y eso nos ha colocado como el generador número uno de empleos en nuestras 10 plantas en el Valle de Sula.
-¿De cuánto ha sido la inversión que Gildan ha hecho en Honduras?
Desde 1997 que nos posicionamos en el país, hemos invertido más de 700 millones de dólares, cifra que irá aumentandocon el paso del tiempo porque estamos en constantes ampliaciones y remodelaciones con el fin de fortalecer la empresa, generar oportunidades de empleo y ampliar nuestro mercado.
-¿Qué producto es el de mayor exportación de la maquila?
La fuerza de exportación de Gildan está en la camiseta básica o de centro y los calcetines, para estos tenemos una cartera diversificada de marcas propias incluyendo las líneas Gold Toe, Anvil y sus extensiones, así como las licencias de Under Armour, Mossy Oak y New Balance. Solo en 2013 la empresa vendió 600 millones de pares de calcetines.
-¿Cuál es el mayor mercado de Gildan?
Nuestro principal mercado es Norteamérica. La compañía distribuye sus productos en el mercado de prendas estampadas a Estados Unidos y Canadá, en donde Gildan es la marca líder en la industria. Somos verticalmente integrados, nosotros hacemos la tela y luego vamos a nuestras plantas de costura donde se hace el ensamblaje. Todo nuestro producto es para exportación.
-¿Tienen algún proyecto de comercialización de la marca para el mercado local?
No. Estamos en una zona libre y el marco dentro del cual nos movemos es para exportar.
-¿Qué beneficios cree que han traído para el país?
Aparte de la creación de empleo permanente, también podemos recalcar la importante entrada de divisas que nuestras exportaciones dejan en Honduras. El movimiento comercial que esto produce hace más dinámica la economía. La cantidad de negocios que se mueven alrededor de la industria que nosotros tenemos es algo sin precedentes, solo imaginen la cantidad de transporte que se utiliza para trasladar empleados y microempresas de alimentación que tenemos dentro de la infraestructura.
-¿Cómo evalúan la mano de obra hondureña?
Para Gildan lo más importante es su gente. El éxito de la compañía a nivel mundial se debe a la calidad de nuestros colaboradores. Estamos muy contentos con el trabajador hondureño. La mano de obra es altamente competitiva porque tiene las habilidades que nuestra industria requiere.
Es por eso que les damos la oportunidad de seguir creciendo. Las plantas de gran magnitud son dirigidas por jóvenes profesionales que comenzaron en áreas de operación y han demostrado su talento y ahora están en posiciones gerenciales.
-¿Cómo han integrado a la empresa el programa del Gobierno “Con chamba vivís mejor”?
Participamos en el programa y hay una buena cantidad de empleados que se han incorporado al mismo, lo trabajamos de la manera en el que el Gobierno lo ha estructurado. La empresa da un subsidio equivalente a tres meses y pasado ese tiempo el empleado se queda permanente en la empresa.
Creemos que en la medida que se creen empleos y haya estabilidad se ayudará a que el país salga adelante y que una familia pueda salir de la línea de la pobreza.
-¿Creen que sea de beneficio para las empresas contratar personal por hora en lugar de contratos permanentes?
En Gildan creemos en el trabajo permanente, entre más tiempo están los empleados en una empresa sus habilidades se van afianzando. La estabilidad laboral es también una forma de motivación y de medir su desarrollo económico y social. Tenemos colaboradores que tienen 17 años con nosotros y sabemos que hemos cambiado su vida.
-¿Qué retos tiene la empresa en un país como este?
Hay retos en temas de energía y seguridad. En la región se deben fortalecer los sistemas de seguridad jurídica y físicos para dar confianza a los inversionistas. Finalmente, los países de nuestra región deben realizar esfuerzos más agresivos para reducir el costo de la energía, fortalecer el uso de energía renovable y reducir la dependencia en el petróleo. Pero también vemos señales positivas en las medidas que se han implementado hasta el momento para no ser tan afectados por esa situación.
-¿Cuál es la relación entre Gildan y los Gobiernos localesdonde están ubicadas sus plantas?
Trabajamos de cerca con las Municipalidades y en general hay un diálogo en cuanto al dinamismo que requiere un compañía como esta y la capacidad de respuesta de las autoridades. La inversión mueve la economía del lugar, basta con ver el crecimiento que ha tenido Choloma en los últimos años, por ejemplo, con cerca de 300 mil habitantes.
-¿Cuál es la responsabilidad de la compañía con el medioambiente?
Desde 2010 la compañía disminuyó su intensidad de emisiones de gases de efecto invernadero en un 32%, reciclamos el 91% de los residuos totales y el 52% de nuestro consumo de energía proviene de fuentes renovables, incluyendo las instalaciones de biomasa que generan el vapor necesario para nuestras operaciones textiles.
Redujimos el consumo del búnker en un 43% y a través de actividades de voluntariado nuestros colaboradores sembraron más de 13,000 árboles.
Más de cinco mil empleos generará este año Gildan en las 10 plantas que tiene en San Pedro Sula, Choloma y Villanueva.
Claudia Sandoval, vicepresidenta de Ciudadanía Corporativa para Centroamérica y el Caribe, habló con LA PRENSA sobre la expansión de la maquila y alabó la calidad de mano de obra hondureña.
Gildan inició sus operaciones en el país en 1997 con una planta de costura. Desde entonces la compañía ha expandido sus operaciones para la producción de prendas deportivas como camisetas básicas, sudaderas, ropa interior y calcetines generando hasta la fecha más de 24 mil empleos en el valle de Sula.
-El año pasado Gildan anunció nuevas expansiones. ¿Cuál ha sido el proceso?
El año pasado iniciamos dos grandes obras. La remodelación de una planta textil que ya está en funcionamiento y con la mayoría de los empleados ya contratados, y la construcción de un centro de distribución que está en el punto de finalización y será inaugurado en agosto. Entre las dos obras se contratarán a unas dos mil personas.
-¿Planean crear más plazas laborales aparte de las que necesitan por las ampliaciones?
Sí. Nuestra proyección es que para finales de 2014 contratemos alrededor de cinco mil personas entre todas las plantas que tenemos. A la fecha hay cerca de 24 mil colaboradores y eso nos ha colocado como el generador número uno de empleos en nuestras 10 plantas en el Valle de Sula.
-¿De cuánto ha sido la inversión que Gildan ha hecho en Honduras?
Desde 1997 que nos posicionamos en el país, hemos invertido más de 700 millones de dólares, cifra que irá aumentandocon el paso del tiempo porque estamos en constantes ampliaciones y remodelaciones con el fin de fortalecer la empresa, generar oportunidades de empleo y ampliar nuestro mercado.
-¿Qué producto es el de mayor exportación de la maquila?
La fuerza de exportación de Gildan está en la camiseta básica o de centro y los calcetines, para estos tenemos una cartera diversificada de marcas propias incluyendo las líneas Gold Toe, Anvil y sus extensiones, así como las licencias de Under Armour, Mossy Oak y New Balance. Solo en 2013 la empresa vendió 600 millones de pares de calcetines.
-¿Cuál es el mayor mercado de Gildan?
Nuestro principal mercado es Norteamérica. La compañía distribuye sus productos en el mercado de prendas estampadas a Estados Unidos y Canadá, en donde Gildan es la marca líder en la industria. Somos verticalmente integrados, nosotros hacemos la tela y luego vamos a nuestras plantas de costura donde se hace el ensamblaje. Todo nuestro producto es para exportación.
-¿Tienen algún proyecto de comercialización de la marca para el mercado local?
No. Estamos en una zona libre y el marco dentro del cual nos movemos es para exportar.
-¿Qué beneficios cree que han traído para el país?
Aparte de la creación de empleo permanente, también podemos recalcar la importante entrada de divisas que nuestras exportaciones dejan en Honduras. El movimiento comercial que esto produce hace más dinámica la economía. La cantidad de negocios que se mueven alrededor de la industria que nosotros tenemos es algo sin precedentes, solo imaginen la cantidad de transporte que se utiliza para trasladar empleados y microempresas de alimentación que tenemos dentro de la infraestructura.
-¿Cómo evalúan la mano de obra hondureña?
Para Gildan lo más importante es su gente. El éxito de la compañía a nivel mundial se debe a la calidad de nuestros colaboradores. Estamos muy contentos con el trabajador hondureño. La mano de obra es altamente competitiva porque tiene las habilidades que nuestra industria requiere.
Es por eso que les damos la oportunidad de seguir creciendo. Las plantas de gran magnitud son dirigidas por jóvenes profesionales que comenzaron en áreas de operación y han demostrado su talento y ahora están en posiciones gerenciales.
-¿Cómo han integrado a la empresa el programa del Gobierno “Con chamba vivís mejor”?
Participamos en el programa y hay una buena cantidad de empleados que se han incorporado al mismo, lo trabajamos de la manera en el que el Gobierno lo ha estructurado. La empresa da un subsidio equivalente a tres meses y pasado ese tiempo el empleado se queda permanente en la empresa.
Creemos que en la medida que se creen empleos y haya estabilidad se ayudará a que el país salga adelante y que una familia pueda salir de la línea de la pobreza.
-¿Creen que sea de beneficio para las empresas contratar personal por hora en lugar de contratos permanentes?
En Gildan creemos en el trabajo permanente, entre más tiempo están los empleados en una empresa sus habilidades se van afianzando. La estabilidad laboral es también una forma de motivación y de medir su desarrollo económico y social. Tenemos colaboradores que tienen 17 años con nosotros y sabemos que hemos cambiado su vida.
-¿Qué retos tiene la empresa en un país como este?
Hay retos en temas de energía y seguridad. En la región se deben fortalecer los sistemas de seguridad jurídica y físicos para dar confianza a los inversionistas. Finalmente, los países de nuestra región deben realizar esfuerzos más agresivos para reducir el costo de la energía, fortalecer el uso de energía renovable y reducir la dependencia en el petróleo. Pero también vemos señales positivas en las medidas que se han implementado hasta el momento para no ser tan afectados por esa situación.
-¿Cuál es la relación entre Gildan y los Gobiernos localesdonde están ubicadas sus plantas?
Trabajamos de cerca con las Municipalidades y en general hay un diálogo en cuanto al dinamismo que requiere un compañía como esta y la capacidad de respuesta de las autoridades. La inversión mueve la economía del lugar, basta con ver el crecimiento que ha tenido Choloma en los últimos años, por ejemplo, con cerca de 300 mil habitantes.
-¿Cuál es la responsabilidad de la compañía con el medioambiente?
Desde 2010 la compañía disminuyó su intensidad de emisiones de gases de efecto invernadero en un 32%, reciclamos el 91% de los residuos totales y el 52% de nuestro consumo de energía proviene de fuentes renovables, incluyendo las instalaciones de biomasa que generan el vapor necesario para nuestras operaciones textiles.
Redujimos el consumo del búnker en un 43% y a través de actividades de voluntariado nuestros colaboradores sembraron más de 13,000 árboles.