25/04/2024
07:02 PM

Expresidente de Bolivia visita Honduras

El exmandatario Carlos Mesa dice que los Estados de América Latina están siendo rebasados por el crimen organizado

San Pedro Sul, Honduras

El expresidente de Bolivia, Carlos Mesa, disertó ayer en el seminario internacional “Reformas electorales en Honduras” y respondió las preguntas de los asistentes y de LA PRENSA sobre los retos que afronta la democracia en América Latina.

El exmandatario señaló que los países latinos se enfrentan a los mismos problemas en relación con las amenazas contra la democracia por la toma del poder absoluto y la infiltración del crimen organizado.

-¿Existen desigualdades durante los procesos electorales?

Los mecanismos de garantía de transparencia electoral en el día de las elecciones se han ido perfeccionando extraordinariamente en América Latina; es muy difícil hablar de fraudes significativos. Puede darse fraude, pero no que cambien una elección. La pregunta debe ser respondida en los procesos antes de la elección, en las reglas del juego, en el financiamiento de los partidos, el acceso a los medios de comunicación, en el freno a quienes desde el Gobierno están propiciando una candidatura. Las reglas del juego durante el camino al voto son las más importantes.

-De acuerdo con su opinión ¿cuál es la imagen democrática que proyecta Honduras?

Estuve como observador del Centro Carter en la elección última en noviembre. En términos generales, la elección se hizo en absoluta paz, con gran participación ciudadana y un resultado creíble. Los partidos de oposición mostraron actitud racional y sensata. Hoy están compartiendo en el Congreso Nacional, reconociendo la derrota a pesar de que tenían o siguen teniendo observaciones del proceso electoral.

-¿Son necesarias las reformas electorales?

Sí creo que son necesarias. ¿Es aconsejable que sean los partidos políticos los que administren el proceso electoral? No será más valioso lograr que el Tribunal Supremo Electoral sea absolutamente independiente en términos de democracia partidaria.

-¿Qué futuro le ve con la crisis actual en Venezuela al socialismo del siglo XXI?

Hay una paradoja, Venezuela atraviesa una crisis económica dramática de salida difícilmente predecible, pero países como Ecuador y Bolivia están viviendo situaciones de bonanza impresionante y de manejo macroeconómico; no necesariamente el modelo en su conjunto funciona bien o mal.

-¿El socialismo del siglo XXI ha cumplido lo que predica?

Creo que ha pecado en algunos casos de exceso, pero igual que el neoliberalismo nos enseñó el buen manejo macroeconómico y que la eficiencia y competencia son necesarias. Las ideas del llamado socialismo del siglo XXI nos enseñaron que el Estado no puede ser olvidado, que tiene que hacer inversión en contra de la pobreza y restituir las riquezas; esos son aspectos fundamentales que no se pueden descuidar.


-¿Cómo analiza al presidente hondureño Juan Orlando Hernández al acercarse al mandatario de Ecuador y anunciar la ampliación de relaciones con Cuba y Venezuela?

Uno de los aspectos fundamentales es el pluralismo, la capacidad que tenga un gobernante de entender que la relación con todos los países es saludable independientemente de su línea ideológica, que el restablecimiento de relaciones con un país distinto no implica una adscripción a esa ideología.

-¿Cómo evalúa la influencia del narcotráfico en la política?

Es algo preocupante y lo hemos venido mencionando. América Latina se enfrenta a un grave problema, los Estados están siendo rebasados por el poder del crimen organizado y eso está generando una debilidad implícita de los modelos y sistemas democráticos. Hacen que los ciudadanos se sientan completamente desprotegidos y vean al Estado incapaz de resolverlo.